En el tema de los nombres casi todo está escrito, ¿o no? El 12 de mayo se presentó Andrés Calamaro en Tucumán y, en una entrevista con nuestra compañera Florencia Bringas, le sugirió que cuando tenga una hija le ponga por nombre Bohemia, título de su último disco. Pareció al principio medio traído de los pelos, pero después se hicieron otros comentarios y la cosa comenzó a cambiar de color. Tanto cuando se pronunciaba el nombre solo, como cuando se lo asociaba con otro: Bohemia María o Dulce Bohemia, por caso.
La verdad es que corrió mucha agua bajo el puente en la historia de los nombres. Décadas atrás eran clásicos los Juan Carlos, María Cristina, Miguel Ángel o Marta Estela, hoy escasamente preferidos. Poco a poco fue abriéndose el abanico y surgieron las Celeste, Marina, Jazmín y los Lisandro, Tomás, Matías, entre otros. Pasó más tiempo. Hoy la ola sigue haciéndose más grande y en su cresta trae muchos nombres para derramar en la playa. Nombres nuevos y otros que vienen de antaño pero están un poco olvidados.
A ver, a ver, qué les parece para las niñas: Soñadora, Bonita, Amorosa, Vida, Cariño, Ternura, Paz, Primorosa, Suave, Alegría, Bella, Alma, Divina. Si no van solos, los acompañamos con Ana o María o Clara. Para los niños hay menos propuestas: Lindo, Noble, Soñador, Corazón, Bueno, Amoroso, Seductor, Valiente. Y le podemos adosar Ángel o Adán. Esto no termina aquí. Seguiremos recibiendo sugerencias. Eso sí, descartamos a los/as Restituta, Pancracio, Anacleto, Eduviges, Telémaco, Petronila, Ultiminio, Hermenegilda y Telésforo.