La agresión que sufrió un abogado el viernes a la madrugada en un boliche de esta capital será investigada a fondo por el fiscal Guillermo Herrera. Así lo manifestaron fuentes tribunalicias, quienes confirmaron que el sábado a la tarde se realizó un allanamiento al local bailable ubicado en San Miguel al 600, y esta semana declararán los testigos del ataque. Alfredo Sosa López tuvo que ser operado luego de que le pegaran un botellazo en la cara, lo que puso en riesgo su capacidad visual. Su abogado, Fabián Nahas, expresó que el joven evoluciona favorablemente, y que no se afectó su visión, aunque sí la movilidad del párpado. Sosa López y sus amigos señalaron que el agresor es otro abogado, con quien habría discutido minutos antes. El acusado presentó el viernes a la noche, a través de sus abogados Roberto Flores y Carlos Posse, un hábeas corpus en el Juzgado de Instrucción de la V° Nominación y un pedido de eximición de prisión en la fiscalía que encabeza Herrera. De esa manera, se pusieron en resguardo ante el eventual pedido de detención que pudiera realizar el representante del ministerio público.

El abogado acusado reconoció a LA GACETA que hubo un intercambio de palabras, pero negó haberlo agredido. Incluso, afirmó que no conocía a la víctima. Herrera caratuló la causa como lesiones graves, según comentaron las fuentes consultadas, y decidió el allanamiento al boliche para ver si alguna de las cámaras del local captó el momento de la agresión.

Además, el fiscal solicitó a los sanatorios en los que fue atendida la víctima que le remitan las historias clínicas y que Sosa López sea revisado por un médico forense.