CANBERRA, Australia.- El clérigo católico más importante de Australia, el cardenal George Pell, se disculpó por décadas de abuso sexual por parte de curas católicos en el país, culpó a una antigua "cultura del silencio" dentro de la Iglesia por el encubrimiento a los sacerdotes y sostuvo que el número de casos disminuyó de forma significativa desde que se empezó a tomar medidas.

En un interrogatorio relacionado con una investigación estatal, Pell negó haber encubierto a curas pedófilos. El cardenal fue interrogado por el público mientras el panel repetía acusaciones de mirar a otro lado. Un padre, incluso, afirmó que tenía una terrible falta de empatía con las víctimas.

La vista en Victoria se está llevando a cabo junto con una investigación nacional sobre abuso infantil en instituciones religiosas en todo el país. La iglesia católica de Victoria confirmó más de 600 casos de abusos a niños por parte hombres de la iglesia.

Pell, es asesor del Papa Francisco sobre las reformas del Vaticano, dijo en una audiencia parlamentaria que la iglesia ha tardado en reconocer el sufrimiento de las víctimas y volvió a pedir perdón.

"Ruego disculpas, lo lamento profundamente", dijo Pell en una tensa audiencia marcada por las, en ocasiones, furiosas preguntas sobre la investigación de la Iglesia y la compensación a las víctimas. Pell compareció durante más de cuatro horas.

"Las pruebas de malos comportamientos y de los crímenes se han reducido considerablemente. Espero que lo peor haya quedado atrás", aseguró Pell, que también comunicó que 300 personas en Victoria han recibido compensación tras sufrir abusos.

Los escándalos por abuso infantil han perseguido a la Iglesia durante más de dos décadas en Australia, Europa y Estados Unidos. Irlanda llegó a cerrar su embajada en el Vaticano en 2011 debido a tensiones relacionadas con los abusos. (Télam-Reuters)