El irregular rendimiento futbolístico de San Martín en la parte final de la temporada 2012/13, obligó al técnico Carlos Roldán a modificar la estructura del equipo en cada uno de los 15 partidos que lleva dirigiendo en su cuarto ciclo en La Ciudadela, una cantidad que enciende alarmas.
Desde aquel 16 de febrero, cuando Roldán debutó con el triunfo por 2 a 1 sobre Juventud Antoniana de Salta, hasta aquí, hubo lesiones, expulsiones y decisiones tácticas que hicieron que el DT lleve utilizados 30 jugadores. Y el número habla por sí solo de los problemas que debió sortear Roldán para encontrar el nivel de juego esperado.
"Me vi obligado a realizar tantas modificaciones porque todavía no encontré el equipo que, por rendimiento, me satisfaga. Soy un hombre al que le encanta que el equipo salga de memoria. Pero hasta ahora, salvo raras excepciones, no lo pude encontrar. Aunque, como soy un obsesivo de mi trabajo, voy a seguir intentando hasta que logre el objetivo", dice el padre de la criatura, el que reconoce haberle dado una oportunidad a casi todos los jugadores del grupo, y el que, a pesar de todo, no es de rendirse: "no soy una persona que baje la guardia tan fácilmente".
La rotación que realiza Roldán en este importante tramo del certamen obliga a todos a esmerarse por completo, porque por rendimiento, salvo casos puntuales, ninguno tiene el puesto asegurado entre los 11. "Desde el comienzo de la temporada que ocurre esto. Puede ser que ahora se note más, por la irregularidad que mostramos en el juego en los últimos cotejos. Pero tenemos un plantel muy parejo. Esto obliga a los futbolistas a no dormirse en los laureles. Y lo mismo pasa cuando te toca salir del equipo por una lesión o expulsión. Es medio complicado recuperar el lugar perdido", analiza el DT.
Y sus jugadores van con la onda del DT. Uno de los que se cargó de paciencia y le demostró que tiene lo suyo para aportar en el sueño de ascenso es Facundo Ermini. "El fútbol es así. En un plantel todos quieren jugar y eso es imposible. Como profesionales que somos tenemos que aceptar que el técnico decida quién juega. Lo bueno es que acá hay una competencia sana y todos tiramos para el mismo lado. Esto nos puede llevar a conseguir el objetivo deseado", opinó el de Pergamino, autor de goles decisivos cuando las papas quemaban, pero que hoy volverá a dejarle la 7 a Gustavo Ibáñez y ocupar un lugar en el banco de suplentes. La llegada de Roldán benefició a Ermini. Sin embargo, el delantero habla por todos. "Somos muchos los que con este DT sumamos minutos", afirmó.
Hoy, a las 21.45, en el partido de vuelta con Libertad de Sunchales, habrá más que una buena chance para poner a prueba la movida del técnico. Los que ingresen deberán dejar la piel para no perder. Una victoria o un empate le dará el pase a la fase 4 a San Martín.