Una médica veterinaria de la facultad de Agronomía fue asaltada y golpeada ayer en un laboratorio, dentro del predio de la Quinta Agronómica. La veterinaria Rosandra Molina entró a las 7.30 a su lugar de trabajo. A esa hora no había gente por los alrededores. Fue a un laboratorio, donde comenzó su rutina laboral hasta que, de pronto, escuchó el ruido de una motocicleta. Un joven, con el pelo teñido, se bajó de la moto y entró a la oficina. "Ando buscando dónde me pueden atender, porque me duele la muela", dijo el visitante. Ella se levantó de la silla para indicarle el camino, pero en ese momento, el intruso mostró un arma de fuego, le apuntó y pidió dinero. "Tengo papeles nada más", le respondió la veterinaria, mientras señalaba el maletín de trabajo. El joven asaltante buscó dinero entre la documentación personal y las fotos de familia hasta que encontró $ 300.
Golpes en el cuerpo
A pesar del dinero hallado, el delincuente no quedó conforme y empezó a gritar. "Dame más, dame más", repetía. Estaba enfurecido y comenzó a tirar cosas al piso, a desordenar toda la oficina. "Me pegó con algo en la cabeza y en el hombro. Me caí al piso -detalló la veterinaria-. Estaba muy nerviosa, pero cuando él vio que no había nada de plata y que yo lloraba, el otro tipo que estaba afuera arrancó la moto y se fueron los dos", recordó.
La doctora Molina salió en medio del shock y buscó ayuda en el centro asistencial, ubicado dentro del predio. "Como soy hipertensa, me dieron medicación y constataron que estaba golpeada. Después el vicedecano Héctor Navarro me acompañó a hacer la denuncia", precisó.
Todo sucedió muy rápido. La víctima dijo que la calle Pellegrini cruza toda la facultad y eso genera más inseguridad, porque mucha gente circula por ahí.