Las tres impugnaciones presentadas tras la elección de consejeros directivos estudiantiles corrieron la misma suerte: fueron rechazadas por la junta electoral de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT). El órgano fiscalizador -integrado por Miguel Ángel Carletti (presidente), Fernando Ganami y la decana de Filosofía, Judith Casali de Babot (vocales)- respondió con escuetos textos los planteos que habían sido presentados en Artes, en Exactas y en Filosofía.

La junta se reunió el lunes y, tras discutir dos horas, definió los planteos. La que menos tiempo de debate ocupó fue la impugnación de Franja Morada (FM) de Artes, contra el acta comicial de la mesa 2. El apoderado, Víctor Rama, denunció, entre otros, que en la elección del martes 7 algunos alumnos votaron dos veces, ya que figuraban en dos padrones -allí se dictan varias carreras, y muchos estudiantes cursan más de una-. La junta rechazó el planteo por extemporal: "la etapa de impugnación de padrones expiró el 16 de abril".

Tampoco prosperó -aunque con la disidencia de Carletti- la impugnación del apoderado de la Juventud Universitaria Peronista (JUP) de Exactas, Salvador Grifasi. Había cuestionado el resultado de la mesa 1, debido a que se había dado, a su criterio, una serie de anomalías. Grifasi denunció que la Policía provincial -la UNT se encuentra bajo la órbita de la Nación: no la alcanza la jurisdicción de esta fuerza- impedía a militantes de la JUP ingresar al lugar del escrutinio; no así a miembros de FM o de Más Exactas -escisión de FM-. Señaló, además, que se registraron 100 sobres firmados sólo por el presidente de mesa. "(Según el artículo 93° del Código Electoral Nacional, norma con la que se rigen los comicios en la UNT), no altera la validez de un voto la firma del sobre solamente por la autoridad de mesa", dice la resolución firmada por Casali y por Ganami. Pero Carletti opinó en forma distinta. Se inclinó por hacer lugar a los planteos de Grifasi, sobre la base, entre otros, de la discriminación que denunció el estudiante, por parte de los policías. "Eso lo privó de una defensa legítima y legal de los intereses de su fuerza, dejándolo en un estado de indefensión absoluta", indicó el titular de la junta. Además, valoró como contrario a derecho que un centenar de sobre lleven sólo la firma del presidente de mesa.

Otra impugnación que llevó su tiempo fue la que presentó en "Filo" Sebastián Céliz, apoderado de la Comisión de Derecho Estudiantil-Franja Morada (CDE-FM). El "morado" había argüido que durante el escrutinio de la mesa 5 no se había validado un voto de esa fuerza, aliada de las autoridades de la UNT. Según la impugnación, la boleta "tenía una rajadura producida al momento del recuento". "El acta comicial no contiene votos recurridos que admitan el análisis y determinación de su validez; y fue debidamente firmada, sin observación, por el fiscal de (CDE-FM)", indica la resolución, firmada por Carletti y por Ganami -Casali se excusó, por ser decana de la facultad donde se dio el planteo-. A la mañana, militantes del Plenario Universitario de Lucha (PUL), de La Darío Santillán y del Movimiento Socialista de Trabajadores (MST), entre otros, tomaron el decanato, previsoriamente. Resulta que si se avalaba el planteo de CDE-FM, esta fuerza habría empatado con el frente PUL-La Darío-MST, y se habría debido sortear el consejero de la minoría. Finalmente, el cargo fue para la izquierda.

En todas sus respuestas, la junta citó el artículo 69° del régimen electoral de la UNT, que advierte que las resoluciones del órgano fiscalizador revisten carácter de irrecurribles en sede administrativa. Hoy asumirán los 39 consejeros directivos estudiantiles electos en las 13 facultades de la UNT.