Dos hermanastros eran intensamente buscados por la Policía. Ayer a la madrugada hubo varios allanamientos en la zona de El Colmenar para tratar de dar con ellos. Los investigadores del crimen del taxista Mario Barrientos les pisaban los talones a los dos hombres más buscados de los últimos días. Finalmente ayer a la tarde, Juan Pajol, de 40 años, y su hermanastro Aníbal Albornoz, de 26 años, se entregaron a la Justicia.

Ambos se presentaron ante la fiscalía VIII° Nominación, a cargo de Adriana Giannoni. Llegaron acompañados por el abogado defensor Alejandro Dieguez. De inmediato, Pajol y Albornoz, conocidos como "Los hijos de la Choripanera", quedaron detenidos, pero el abogado les recomendó no prestar declaración indagatoria, al menos por ahora.

El taxista Barrientos fue asesinado en la madrugada del domingo en un camino vecinal de Los Ralos. El auto en el que solía trabajar fue abandonado a 23 kilómetros del sitio donde se halló su cuerpo sin vida.

Compartieron el auto

Lo más curioso del caso es que Pajol había sido taxista tiempo atrás. Inclusive llegó a manejar el mismo auto en el que mataron a Barrientos. Según pudo constatar LA GACETA, Pajol trabajó como chofer del taxi que es propiedad de Carlos Conde. Pero quedó sin trabajo porque faltaba a su responsabilidad. Ahora, la fiscala Giannoni maneja dos hipótesis. La primera es que Pajol y su hermano asaltaron al taxista, pero al ser reconocidos por Barrientos decidieron matarlo. La víctima solía hacer parada de taxi en avenida Independencia y Pellegrini. Pajol vivía en esa zona.

La segunda hipótesis apunta a que Barrientos habría mantenido una relación con Nancy Guaráz, que fue detenida el miércoles en su vivienda del pasaje Superí al 2700. La mujer era concubina de Pajol. Todavía resta determinar si los tres subieron al taxi en la madrugada del domingo o si iban sólo dos personas. En la fiscalía sospechan que Nancy Mabel Guaráz citó al taxista Barrientos y después fue a buscar a Pajol y a su hermano. Esta teoría se asienta en el hecho de que el cuerpo del taxista fue hallado con las manos atadas con un cordón de zapatilla de color rosa, según fuentes tribunalicias.

Además, la fiscalía tiene en su poder una libreta que se secuestró del vehículo que conducía Barrientos. Quienes lo mataron al chofer no se dieron cuenta que adentro del vehículo estaba esa suerte de "agenda de trabajo" que llevaba siempre el taxista. En esa libreta o agenda aparece un dato fundamental que sirvió para atar cabos en el proceso de investigación.

El dato que anotó Barrientos con su puño y letra dice "pasaje Superí 2700", que es el domicilio de Nancy Mabel Guaráz. Al descubrir ese dato, la fiscalía pidió el allanamiento en la vivienda. En el procedimiento realizado el miércoles se encontraron algunos elementos que pertenecían a la víctima. Además, trascendió que la mujer fue la encargada de vender el taxímetro y la ticketera del auto que conducía Barrientos.