El teólogo y ex sacerdote brasileño Leonardo Boff consideró que el papa Francisco puede cambiar el sentido de la Iglesia y recuperar su credibilidad porque es un pastor cercano al pueblo. Además, confirmó que el Sumo Pontífice quiere visitar una favela durante su visita a Brasil.
Durante una entrevista con la agencia de noticias DyN, Boff, uno de los más destacados representantes de la llamada Teología de la Liberación, afirmó que espera que el nuevo jefe de la Iglesia Católica Romana rompa una tradición por la que algunos temas no se podían discutir porque estaban literalmente prohibidos, entre ellos el celibato. "Mi esperanza es que él deje que todos estos temas se discutan para que otras voces puedan ser sentidas, oídas y se llegue a un cierto equilibrio: que el cristianismo no sea una pesadilla, sea una buena noticia", expresó.
De visita a la Argentina, adonde llegó para presentar el libro "Cartas de Clelia y Jerónimo Podestá", de Clelia Luro, el ex fraile franciscano expresó que la elección de Jorge Bergoglio como Sumo Pontífice fue recibida con una gran alegría en Brasil. Sin embargo, dijo en broma que, al enterarse de que era argentino, muchos comentaron: "es injusto, ellos ya tienen a (Lionel) Messi, ahora el Papa, entonces estamos perdidos; ahora falta que salga campeón San Lorenzo'".
"Es un Papa que se ha puesto en el centro la opción por los pobres, la expresión de la justicia, de que la pobreza no se combate con el asistencialismo, sino buscando relaciones más justas; y esto, creo, va a reforzar los gobiernos y democracias con las políticas que tienen como centro al pueblo", señaló Boff.
"Francisco da ejemplos y gestos que traen convicción a las personas y ha mostrado que va a tener otra relación con el poder. No es un Papa con la punta y gloria, sino que es un pastor que huele a ovejas Y eso va a cambiar el sentido de la Iglesia, de recuperar su credibilidad y volverse más cercana al pueblo", analizó.
Luego, se refirió a cómo el Papa podría hacerle frente a la corrupción en la Santa Sede: "es una tarea muy difícil, porque es una institución que tiene más de mil años de historia y hubo mucha corrupción. Creo que él va a ser más jesuita que franciscano. Va a tener que ser más exigente, más vigilante. Y menos franciscano en esto, es decir, menos dulce, menos tolerante porque, en cuestión de corrupción, hay que ser extremadamente correcto y alejar a aquellos que están manipulando la iglesia".
Desafíos
El teólogo también habló sobre la realidad de Brasil, uno de los países con más fieles católicos en el mundo y del cual, sin embargo, en los últimos años muchos han migrado a otras iglesias. "¿Es posible que Francisco revierta esta tendencia?", se le preguntó. "La estructura de la Iglesia Católica hoy no está en condiciones de atender las demandas religiosas del pueblo. Ha creado un vacío, y ahí han llegado otras iglesias que han atraído a otros cristianos. Pero la Iglesia debe hacer una revisión: sea de la forma de hacer la pastoral, los métodos o de la cuestión del celibato, para que los cristianos se sientan dentro del catolicismo y no necesiten migrar a otro tipo de iglesia. Y espero, además, que no haya conflicto por la existencia de estos nuevos templos, sino que se acepte la multiplicidad de iglesias que llevan adelante el legado de Jesús y que no se vea esto como algo dramático, sino como algo que puede existir en una institución abierta y democrática", sostuvo.
Finalmente, dio detalles sobre los preparativos para la visita del Papa a su país. "Está todo listo porque se espera la llegada de un millón de personas. Francisco ya dijo que quiere visitar una favela de Brasil, también ha pedido visitar la ciudad de Aparecida, sede del mayor santuario de Brasil, y creo que esos dos gestos van a ser muy bien aceptados por el pueblo brasileño", concluyó.