BERLÍN.- Cuando se habla de las redes sociales no siempre se trata de un intercambio de frases entre amigos o de una divertida pérdida de tiempo. En las plataformas profesionales se hallan posibilidades de trabajo, colegas potenciales y consejos para elegir una profesión.
Cuando Svenja Hofert examina los perfiles en las redes profesionales online, no hace más que sacudir la cabeza. "De 100 perfiles, 95 no sirven para nada", dice esta asesora profesional, sobre las presentaciones de los usuarios en plataformas como Xing o LinkedIn. La lista de fallos es larga: "fotos cómicas o ninguna foto, pocos contactos y declaraciones que no dicen nada". Así no se alcanza ninguna meta, dice Hofert. En el fondo, las redes profesionales funcionan igual que Facebook o Google+: tras registrarse, el usuario debe rellenar un perfil con sus datos, citar contactos con otros miembros de la red o intercambiar mensajes privados con ellos. Además de mantener contactos, el usuario tiene también la posibilidad de formar grupos y establecer comunicaciones entre sus miembros.
Al contrario que Facebook y otras redes sociales, aquí todo está centrado en la propia carrera. "Hay ya muchas empresas que buscan especialistas apropiados a través de las redes sociales especializadas", dice Valentine Wolf-Doettinchem, de la sociedad alemana de asesoramiento profesional (DGfK). Las redes sociales son el medio ideal para establecer contactos dentro del mercado laboral encubierto, es decir, hallar puestos de trabajo no publicitados.
Es por ello que, como usuario, hay que pensar muy bien lo que lo que se pone (y lo que no se debe poner) en el perfil. "De lo contrario, el resultado puede ser contraproducente. Porque el perfil equivale casi a una tarjeta de visita", dice Wolf-Doettinchem, asesora en materia de comunicaciones. En la confección de esta tarjeta de visita digital ayudan las instrucciones mismas de los portales.
Quien no ponga cuidado en la confección del perfil tampoco obtendrá mejores resultados en su búsqueda de un empleo. "El saber completar el perfil es ya una prueba de eficiencia", dice Wolf-Doettinchem. Tampoco carece de sentido hacer un perfil y luego olvidarlo: "Yo también tengo la responsabilidad de revisarlo al menos una vez por semana", agrega Svenja Hofert. Hay que responder regularmente al menos las peticiones de contacto.
El perfil del usuario, en todo caso, debe coincidir con el curriculum y dar una impresión profesional. Pero, sobre todo, no hay que presentarse como una persona sin personalidad, dice Wolf-Doettinchem. Se puede incluir sin problemas, por ejemplo, los intereses personales y los hobbys. En la elección de una foto para el perfil, lo mejor es optar por un retrato clásico. Lugares comunes como "apto para el trabajo en equipo" y "flexible" están prohibidos en la descripción personal. Lo que realmente ayuda son datos precisos sobre lo que el usuario puede y quiere hacer.
Evitar los excesos
Para alcanzar una buena incorporación a la red, lo mejor es tomar parte activamente en ella. "Hay que participar, por ejemplo, en diferentes foros y discusiones - pero, sobre todo, a alto nivel", recomienda Wolf-Doettinchem. Es también aconsejable dirigirse derechamente a otros miembros de la red social que podrían ser de ayuda en la carrera.
Éstas pueden ser personas que ya están trabajando en la empresa en la cual se está interesado. Pero, tal como la pasividad, el exceso de actividad puede ser también contraproducente: el escribir con demasiada frecuencia a otros usuarios puede acabar enervándolos.
Además de buscar un empleo, hay que cuidar también la protección de datos. "En plataformas como Xing, los datos están suficientemente protegidos", dice Thomas Floss, de la asociación alemana de protección de datos. Pero otra cosa es como los norteamericanos entienden la protección de datos, advierte el experto. Así, no es suficientemente claro lo que pasa con los datos en el portal norteamericano LinkedIn, interesante sobre todo en lo referente a los contactos internacionales.
El experto aconseja por ello consultar regularmente el propio nombre en Google: así al menos puede saber qué se dice en la web sobre su persona.
Floss aconseja asimismo, tras registrarse, revisar los ajustes sobre seguridad y privacidad en el portal en cuestión. En buenas cuentas, un perfil en una red social profesional suele contener más datos sensibles que una cuenta en Facebook.
Cautela es también aconsejable al poner frases como "Busco un nuevo desafío". Esto, en buen castellano, quiere simplemente decir "Busco un nuevo trabajo". Y esto "con seguridad no le caerá bien a su actual jefe", señala el especialista. (DPA)