BUENOS AIRES.- El arquero de San Lorenzo Pablo Migliore, detenido desde el 31 de marzo, admitió que se equivocó al contactarse con el prófugo barrabrava de Boca Maximiliano Mazzaro, pero remarcó que lo hizo para presentarle "un chapista", no "un traficante de armas", y que ya pagó "con creces" por ese "error".
"Yo reconozco que me equivoqué, pero ya pagué, pagué demasiado", manifestó el futbolista en un reportaje con el diario deportivo "Olé" desde el penal de Ezeiza, en el que dijo que no estaba "al tanto de la gravedad de todo".
Migliore, de 31 años, contó que "hace dos días" que no come por la situación que atraviesa y consideró "injusto" lo que está viviendo, al estar acusado del encubrimiento de Mazzaro por un crimen cometido en agosto de 2011 en el barrio porteño de Liniers.
"Todas las noches me voy a dormir abrazado a la Biblia y me despierto en la misma posición, con el libro entre mis manos", relató.
El arquero reconoció que Mazzaro fue a verlo a su casa cuando el barra estaba prófugo de la Justicia, aunque aseguró que no entró y que lo atendió en la puerta.
"El vino a mi casa, tocó el timbre y fue todo en la vereda, no adentro. No miento, que pidan la antena donde rebota el celular. Yo no fui a ayudarlo, él vino por mí. Me pidió por el chapista. ¿Qué hacía, le respondía que no?", planteó.
En la misma línea, comentó que a Mazzaro lo conoció "yendo a ver a Boca", pero insistió en que no tiene "nada que ver" con lo que le imputan y que pagó "con creces" por ese "error".
"Es sólo una persona que te pide que le presentes un chapista y se lo presentás, qué vas a hacer, no le estoy haciendo contacto con un traficante de armas", se defendió.
Migliore declarará hoy en la causa por la que está preso y acusado de encubrir a Mazzaro, el número 2 de la barra brava de Boca.
Lo hará después de negarse a contar su versión a la Justicia el 1 de abril último, un días después de que fuera detenido en la cancha de San Lorenzo tras el partido ante Newell's en el estadio "Nuevo Gasómetro".
En la causa se investiga el crimen de Ernesto Cirino, quien fue atacado por barras de Boca el 29 de agosto de 2011 en Pieres y Caaguazú, Liniers, luego de discutir por las deposiciones de su perro con su vecino Gustavo Petrinelli, cuñado del jefe de la barra brava de Boca, Mauro Martín, a quien llamó para que acuda a ayudarlo y concurrió al lugar con Mazzaro y Daniel Wehbe.
Martín y Petrinelli están procesados y presos por el delito de homicidio simple, mientras que Migliore y Maximiliano Levy, un allegado a la barra de Boca, lo están por encubrimiento agravado de Mazzaro.
En tanto, Mazzaro y Wehbe están prófugos y este último fue sindicado por Martín como quien agredió a Cirino. (DyN)