ESTAMBUL.- Las organizaciones humanitarias tienen cada vez más problemas para llegar a los necesitados en Siria debido a la creciente violencia que vive el país, denunció el Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU. Los trabajadores del PMA no consiguen acercarse a muchos de los millones de sirios que pasan hambre. La organización llamó a todas las fuerzas beligerantes a facilitar el acceso a los miembros de los grupos humanitarios. En marzo se pudo prestar ayuda a casi dos millones de personas en 14 provincias sirias. Sin embargo, hay problemas en las inmediaciones de Damasco, Kuneitra, Daraa, Deir as Saur y en muchas regiones del norte del país, sobre todo en Alepo e Idlib.
Los almacenes y camiones se ven afectados cada vez más por el fuego cruzado de los contendientes. Tres camiones con alimentos para 17.000 personas fueron retenidos por un grupo armado en la provincia de Deir as Saur. Según el PMA, sus vehículos e instalaciones fueron atacadas en más de 20 ocasiones desde que iniciaron las labores de ayuda, en diciembre de 2011. "Llevar alimentos de una zona a otra se convierte cada vez más en una lucha", alertó el coordinador de la entidad, Muhannad Hadi.
La agencia de Naciones Unidas para los refugiados, ACNUR, reclamó más ayuda y alojamiento para los exiliados sirios en los países de la región. La situación es especialmente complicada en la parte kurda de Irak, donde cada día llegan entre 800 y 900 refugiados, más del doble de hace tres meses. A fin de marzo el número de exiliados llegó a los 1.2 millones. En la continuidad de la guerra, un bombardeo con morteros lanzado durante un combate entre fuerzas del régimen y rebeldes impactó sobre los Altos de Golán ocupados por Israel. Las tropas israelíes respondieron el ataque. La ONU alertó sobre la extensión del conflicto hacia otros países. (DPA-Reuters)