El defensor Deivis Barone acaba de convertir el segundo gol de Atlético que le daba la ventaja en el partido. El capitán celebró apretando los puños y con los ojos perdidos. La alegría le duró poco, pero la locura y la alegría con que celebró, no se las quita nadie. 

LA GACETA
LA GACETA
LA GACETA
LA GACETA
LA GACETA
LA GACETA
LA GACETA
LA GACETA
LA GACETA
LA GACETA
LA GACETA