El 27 de diciembre fue la última vez que sesionó el Concejo Deliberante de la capital. Ese día, los ediles aprobaron una batería de ordenanzas. Entre ellas, la modificación de la norma tributaria que autorizó incrementos impositivos para este año.
Luego de dos meses y medio de parálisis parlamentaria, los concejales volverán al recinto de sesiones para debatir temas relacionados con la realización de obras públicas en algunas calles de la ciudad.
También está previsto que los ediles aprueben el pedido de licencia anual presentado por el intendente, Domingo Amaya. El jefe municipal prevé solicitar 60 días para poder ausentarse de la provincia por motivos laborales.
Otro de los temas que llegará al recinto de San Martín y Monteagudo es un proyecto de ordenanza del edil alperovichista Ignacio Golobisky, que prevé la creación un registro de los carros de tracción a sangre que circulan a diario por San Miguel de Tucumán. Cabe señalar que Golobisky promociona la erradicación de este tipo de vehículos. El alperovichista busca que quienes desarrollan alguna actividad comercial en carros puedan, en un futuro, adquirir motocarros y eliminen paulatinamente el uso de animales como medio de locomoción.
Según comentan en los pasillos del Concejo, algunos ediles esperan con ansiedad el período de manifestaciones generales. Durante este espacio que se abre al inicio de la cada sesión, los representantes vecinales pueden brindar opiniones políticas respecto de la gestión de gobierno. La polémica por el proyecto de modificación del Sutrappa será un tema "de cajón" que seguramente elegirán los ediles a la hora de opinar.
El jueves próximo, el Concejo volvería a sesionar para ratificar la ley aprobada anoche por la Cámara, que liberará la llegada de fondos del plan "Más Cerca". A la capital le corresponden 12 obras por unos $ 5 millones.