El crimen de Aníbal Gabriel Álvarez, ocurrido el domingo a la noche cuando regresaba del carnaval de Ranchillos, estaría esclarecido. Así lo aseguraron desde la Policía, luego de que allanaran la vivienda del único y principal sospechoso, que pertenece a la fuerza.

El autor del homicidio sería Carlos Alberto Reyna, un sargento que prestaba servicio en el Área Investigativa de la seccional 4ª. El policía fue aprehendido el lunes al mediodía y ayer la Justicia ordenó su detención. Mientras Reyna permanece alojado en la base del Comando Radioeléctrico, personal de la división Homicidios y Delitos Complejos allanó su vivienda.

En la casa del sargento, ubicada en el barrio 440 Viviendas de Las Talitas, los uniformados encontraron la camioneta que había estado involucrada en el altercado que derivó en la muerte de Álvarez, de 27 años. La Kangoo blanca quedó secuestrada y será sometida a las pericias correspondientes.

El asesinato ocurrió en la ruta 302, a la altura de la entrada al barrio Aeropuerto, en Banda del Río Salí. Álvarez circulaba en una camioneta F100 y el presunto homicida, en la Kangoo blanca, que no tenía chapa patente. Según trascendió, uno de los vehículos le bloqueó el paso al otro, entonces sus conductores se bajaron, comenzaron a discutir y Reyna habría sacado un arma con la que le disparó a Álvarez.

La víctima viajaba en el asiento de acompañante, ya que el rodado era conducido por Oscar Rolando Pérez. En la caja, en tanto, iban dos mujeres. Cuando comenzó el incidente, Pérez recibió una fuerte golpiza. Álvarez intentó ayudarlo, pero el agresor sacó un arma y lo mató de un tiro en la cabeza.

Desde un principio, la Policía apuntó a Reyna como el presunto autor del crimen. Hasta ayer, sólo les faltaba hallar la camioneta para confirmar su participación en el hecho y así lo hicieron.