Su cara lo decía todo. En un deporte grupal como el fútbol, los logros individuales no siempre se disfrutan. De nada sirve ser figura si tu equipo no logra el objetivo. Y ayer, Cristian Lucchetti experimentó esas amargas sensaciones.
"Laucha" fue gigante contra Aldosivi y mucho tuvo que ver para que el "tiburón" no se comiera a un Atlético apático. Seguro en sus intervenciones, transmitió confianza bajo los tres palos y sacó las papas del fuego en más de una ocasión. Pero se fue del Monumental masticando bronca, culpa de un empate con sabor a nada que alejan el sueño que acunan en 25 de Mayo y Chile.
"Me voy con bronca, dejamos pasar otra chance de acercarnos a los primeros puestos", fue el primer mensaje del arquero, que se desvive por el objetivo grupal. "Estoy tranquilo porque no me convirtieron, pero nosotros teníamos que ganar y no lo hicimos", destacó el número uno.
Atlético entró en un tobogán alarmante y la caída en las posiciones amenazan con destruir el idílico objetivo de llegar a Primera. De los últimos 12 puntos, el "decano" sólo sumó 3. Poco, muy poco para pensar en grande. Y Lucchetti sabe que el margen para el error es casi nulo ya. "Los de arriba siguen sacando puntos y eso nos complica más. Pero mientras tengamos posibilidades matemáticas vamos a seguir luchando", afirmó confiado.
Todo se le hace cuesta arriba a un Atlético que parece no encontrar el rumbo. "Laucha" no anda con misterios y revela el porqué del bajón. "Es un torneo muy parejo y desgastante. Todos los equipos son complicados y encima nosotros no venimos bien".
Falta mucho en el largo camino al cielo. Con 42 puntos en juego, todo puede pasar. Pero Lucchetti no come vidrio, sabe que los dos próximos duelos (Gimnasia La Plata y Rosario Central) son claves y ganar es la única opción. "No definen nada, pero sabemos que si no sacamos buenos resultados se nos pasará el tren. Eso lo tenemos asumido", finalizó.