Se habló -y se pidió- mucho sobre un clásico en paz. Sin embargo, una vez más, la violencia dijo presente. Al finalizar el encuentro entre Atlético y San Martín, donde el "decano" avanzó a la siguiente fase de la Copa Argentina, la policía y un grupo de simpatizantes "santos" se enfrentaron en las calles.

Los hechos se registraron afuera del estadio Monumental, en las que hubo disparos de balas de goma, pedradas y corridas. Por el momento habría dos policías heridos.

Antes, durante el partido y cuando quedaba poco tiempo por jugar, algunos simpatizantes de San Martín rompieron la tela del alambrado, lo que derivó en la suspensión del encuentro por siete minutos.

Por lo menos, 1.500 policías estuvieron a cargo de la seguridad para el clásico tucumano. Antes de comenzar el partido, también se registraron algunos incidentes, pero no pasaron a mayores. LA GACETA