SALTILLO, México.- En un mundo donde las creencias religiosas ya no son lo que eran; donde lo impartido por la Iglesia es discutido hasta el cansancio en el seno más profundo de la familia, motivado por los recientes hechos de pedofilia y otro tipo de delitos; un sacerdote se atreve a no perder la fe. Su nombre es Humberto Álvarez. Nació en 1972 y cumple funciones sacerdotales en la localidad de Ojo de Agua. Allí, utiliza una estrategia pocas veces vista, y hasta impensada para una institución tan rigurosa, con el objetivo de acercar a los niños y evitar que se alejen de las enseñanzas.
Vestido con un hábito repleto de estampas de los superhéroes clásicos de los comics, Álvarez concentra toda su energía en brindar la misa para los niños. Incluso, a la hora de bendecirlos con agua bendita, utiliza una pistola de juguete. Este es uno de los pasajes más atractivos de la renovada liturgia, la cual atrajo de vuelta un porcentaje de desertores de la fe.
Fueron las cifras las que motivaron el cambio de estrategia en la Diócesis de Saltillo, donde se desempeña el padre Humberto. En Coahuila, por ejemplo, en las últimas dos décadas la población católica se encogió. En 1990, 92.8% de los coahuilenses eran católicos, ahora los fieles representan 81.7% de los habitantes. El grupo de protestantes y evangélicos pasó de 6.2 a 10.2% en el mismo período, en tanto que los ateos y las personas sin religión también aumentaron, de 3.1 a 5.4%. Con la nueva técnica, la situación se revirtió, aunque no demasiado.
Ahora bien, ¿por qué escoger a 'Batman' y 'Superman' para hacer llegar el mensaje de la fe? "Por sus historias. Nos hablan de actitudes de lucha y esfuerzo, de lograr vencer temores, encontrar la paz y el perdón. Jesús fue diferente y buscó la justicia siempre, debemos seguir su ejemplo", contestó al portal Zocalo.com.
¿Marketing? ¿Distracción? ¿Renovación? Quién sabe. Parece ser que en la Iglesia mexicana todo se vale, más aún si se trata de reconquistar ovejas perdidas. LA GACETA ©