Es el tercer hecho de esas características que ocurre desde que empezó el año. En los tres casos, las víctimas fueron atropelladas y abandonadas cuando se dirigían a trabajar. Y en los tres casos, las víctimas se llamaban Rubén. Primero le pasó a un canillita, después a un cartero y ahora le tocó a Roberto Rubén Jiménez, un joven de 26 años que trabaja como repositor en un supermercado céntrico.
El accidente ocurrió el primer domingo de febrero a la mañana, cuando no había demasiado tránsito ni personas en la calle. Eran las 9.10 y Jiménez se dirigía a su trabajo en una moto Honda 125cc, con la que había salido de su casa, ubicada en Banda del Río Salí. El joven circulaba por calle Marcos Paz, de este a oeste, cuando una camioneta lo sorprendió por Maipú.
Según dijo, el vehículo de mayor porte pasó el semáforo en rojo y lo arrolló. El joven terminó tirado en el pavimento, luego de dar dos tumbos. Pese a la gravedad del hecho, el conductor de la camioneta continuó la marcha y no hizo nada por detenerse.
"En ese momento, había un policía parado en esa esquina que vio todo y avisaba por handy lo que estaba pasando porque no tenía cómo perseguirlo", destacó Jiménez. Ese mismo policía fue el que llamó una ambulancia para que lo trasladaran al hospital.
Más tarde, el uniformado declaró que la camioneta era una Eco Sport color gris, con vidrios polarizados, patente IYI 100. Sin embargo, no pudieron dar con su conductor ni con el vehículo. El abogado de Jiménez, Juan Sebastián Bauque, informó que en la Policía le dijeron que -según las primeras averiguaciones- esa chapa patente no pertenecía a esa camioneta.
El letrado acudió a la Fiscalía de la X° Nominación y la fiscala María de las Mercedes Carrizo, que subroga a Guillermo Herrera, le comunicó que había ordenado el secuestro de la camioneta y la aprehensión de su conductor. Asimismo, dijo que había solicitado las grabaciones de las cámaras de seguridad que funcionan en la zona para analizar si alguna registró el momento en que huía el vehículo.
El joven accidentado estuvo internado hasta el jueves en el hospital Centro de Salud con traumatismo de cráneo, un esguince en el pide derecho y fuertes golpes en la zona lumbar. Si bien regresó a su casa, todavía desconocen cuándo podrá volver a trabajar. Sus familiares destacaron que "se salvó gracias al casco".