ASUNCIÓN.- La muerte del conservador candidato presidencial Lino César Oviedo Silva, en un accidente aéreo, sacudió el panorama político paraguayo. El militar retirado murió ayer, a los 69 años, cuando el helicóptero en el que se desplazaba junto a otros tres allegados, se precipitara contra el suelo en la región del Chaco, al norte de Asunción, capital del vecino país.
La nave se dirigía desde Concepción hacia Asunción, en una de las etapas de la campaña presidencial. Los restos, totalmente desintegrados, fueron hallados en la zona rural de Puerto Antequera. La ministra de Defensa, María Liz García, acudió al lugar del siniestro y afirmó que el helicóptero Robinson 44, en el que viajaba Oviedo, y los restos de las tres víctimas, quedaron carbonizados.
El presidente, Federico Franco, decretó tres días de duelo oficial y suspendió todas las actividades, incluyendo una reunión del Consejo de Ministros. Franco prometió investigar todos los detalles del siniestro, en tanto expresó sus condolencias a la familia, y "a todo el pueblo paraguayo" por la pérdida de quien consideró "uno de los héroes de la gesta libertaria del 3 de febrero de 1989". Oviedo "fue una de las personas que trajo la libertad a Paraguay", agregó. Carmelo Caballero, Ministro del Interior, anunció que el "Gobierno no va a escatimar recursos" para esclarecer totalmente los hechos.
La muerte del dirigente político de la Unión Nacional de Ciudadanos Éticos (Unace) se produjo en el vigésimo cuarto aniversario de la caída del dictador Alfredo Stroessner, ocurrida en la madrugada del 3 de febrero de 1989, en el que Oviedo tuvo una participación protagónica.
Esta coincidencia disparó una serie de especulaciones sobre las causas del accidente, alimentadas por el vocero de prensa de la Unace, César Durant, quien denunció que fue "un crimen político" y un "mensaje de la mafia", aunque no profundizó en sus sospechas ni acusó a ninguna agrupación en particular. "Es un crimen político. Él jamás iba tomar un vuelo si sabía de un frente de tormentas; él era una persona muy responsable", afirmó.
En tanto, el senador Jorge Oviedo Matto descartó la hipótesis de un atentado. "No quiero adelantarme a ese tipo de conjeturas antes del peritaje", dijo el legislador, que es uno de los dirigentes con posibilidades de asumir la dirección del partido. El presidente de la Dirección Nacional de Aeronáutica Civil (Dinac), Carlos Fugarazo, no descartó ninguna posibilidad y dijo que ya se puso en marcha el plan de investigación. "Mañana se iniciarán los contactos con expertos en accidentes aéreos y especialistas".
Oviedo fue uno de los oficiales del Ejército encargado de detener a Stroessner en la madrugada del 3 de febrero de 1989. Se le atribuye haber irrumpido en el búnker del dictador con una granada en su mano, para forzar la rendición. Desde aquel momento su figura entró en el escenario político del país.
El 15 de mayo de 1996 fundó e inscribió en el Tribunal Electoral del Partido Colorado a un movimiento interno que se llamó, en principio, Unión Nacional de Colorados Éticos (Unace) con el que participó en las internas partidarias de 1997.
Estuvo detenido en varias oportunidades en la década de 1990 por sus críticas al Gobierno y en 1999 se le acusó de estar vinculado con en el asesinato del vicepresidente José María Argaña, hecho ocurrido el 23 de marzo, y en la muerte de siete jóvenes durante las manifestaciones de protesta que se sucedieron hasta el 27 de ese mes.
En 2002 se separó del Partido Colorado y fundó un nuevo partido político al que denominó Unión Nacional de Ciudadanos Éticos (Unace), que registró en mayo de 2003.
Su muerte deja un vacío de liderazgo en la Unace, que conducía con un estilo rígido y personalista y que impacta en el panorama político de Paraguay, de cara a las elecciones nacionales a cumplirse el 21 de abril. (DPA)