Si bien se los impone el protocolo, Máxima sabe llevar los sombreros o tocados mejor que ninguna de las mujeres de la realeza. Un amplísimo repertorio de sombreros acompaña siempre su vestuario. Uno de sus diseñadores preferidos para ellos es Fabienne Delvigne. La princesa luce de todo y todo le queda bien: desde vistosas pamelas, pasando por coloridos sombreros y diademas de tela rematadas con lazo, hasta gorras de corte femenino. Están elaborados todos con las materias primas más nobles como la fina paja italiana, cashemere y muselinas.