RIO DE JANEIRO, Brasil.- Uno de los propietarios de la discoteca Kiss, que se incendió en la ciudad brasileña de Santa María, donde murieron 235 personas, intentó quitarse la vida en el hospital en el que está bajo custodia policial, luego del trágico suceso.

Elessandro Spohr, uno de los dos socios del local, trató de ahorcarse con una manguera en uno de los baños del centro médico, donde se recupera de problemas respiratorios a causa del humo que provocó el siniestro. Allí, además, es vigilado por uniformados, según publicó el diario local Oglobo.com.

El intento de suicidio fue confirmado por Marcelo Arigony, uno de los comisarios de la Policía Civil del estado de Río Grande do Sul, quien tiene a cargo la investigación de la tragedia. "El empresario se encuentra en buen estado, pero fue esposado a la cama para evitar un nuevo intento", remarcó el uniformado.

En tanto, el otro propietario de la discoteca Kiss, Mauro Hoffmann, fue detenido también el lunes tras presentarse ante la Policía, luego de que las fuerzas de seguridad fracasaran en diferentes operativos para localizarlo. LA GACETA ©