Los anuncios marchan sobre rieles, pero no a la velocidad de las concreciones. Quitarle el cinturón ferroviario a la ciudad ha sido complicado. Desde hace al menos dos décadas se viene amagando con la posibilidad de hacer más fluido el tránsito entre el centro de San Miguel de Tucumán y la zona oeste de la ciudad. Las vías del ramal Central Córdoba no se lo han permitido hasta ahora. Desde que José Alperovich asumió como gobernador de la provincia, hubo no menos de siete anuncios acerca del proyecto para la apertura de las calles Mendoza y Córdoba al 1.100, en la intersección con la Marco Avellaneda. Ayer se sumó un eslabón más a la cadena de anunció.

Según afirmó a LA GACETA el propio Alperovich, esta vez el emprendimiento puede ver la luz al final de dos túneles. El ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, le dio vía libre a la iniciativa para construir esos túneles a partir de este 2013, de elecciones. "Hace nueve años que venimos peleando por esto y ahora obtuvimos el permiso para avanzar con la obra y, además, el financiamiento federal", resaltó el mandatario, luego de la entrevista que mantuvo en Buenos Aires con Randazzo.

De esa reunión también participaron el ministro de Salud, Juan Manzur, y el intendente de Tafí Viejo, Javier Pucharras. La reactivación definitiva de los talleres ferroviarios fue otro de los anuncios oficiales.

En 2004, surgió la idea de construir dos puentes elevados sobre las vías del ferrocarril. También se habló de trasladar la estación de cargas hacia otras zonas y hasta de la construcción de un emprendimiento inmobiliario, una suerte de "Puerto Madero tucumano". En 2007, la Provincia y la Municipalidad de San Miguel de Tucumán diseñaron la ejecución de obras para cavar dos puentes que conectarían al centro con el oeste de la ciudad. Esa iniciativa, además, contempla la posibilidad de convertir a la calle Marco Avellaneda en avenida semaforizada, desde San Martín hasta San Juan.

"Desde el Gobierno nacional financiaremos la construcción de estos dos pasos bajo nivel que redundarán en calidad de vida para todos los tucumanos, porque se eliminarán las esperas en el cruce de vías, se incrementará la integración y se prevendrán accidentes de tránsito", dijo Randazzo tras el encuentro con Alperovich, según el parte distribuido por la Secretaría de Prensa y Difusión de Tucumán.

El martes, funcionarios provinciales elevarán el proyecto definitivo al Ministerio del Interior y Transporte. Según los cálculos de Alperovich, el financiamiento de la obra puede demandar unos $ 45 millones. Ese mismo día, el ministro de Seguridad, Jorge Gassenbauer, el intendente taficeño y representantes de los talleres volverán a Buenos Aires para hablar sobre la reactivación ferroviaria en Tucumán. "Hay pasos concretos en ese sentido. El lunes, el personal dispondrá del dinero que requieren para herramientas e insumos", dijo Alperovich. Remarcó "la decisión política presidencial para la reactivación de los talles, un viejo anhelo de los tucumanos y de Néstor Kirchner". El titular del PE acotó que es necesario designar un jefe en los talleres, que participará de las reuniones con los funcionarios nacionales. "Con el aporte financiero comenzarán en el corto plazo las obras en Tafí Viejo. Es un hecho que será fundamental e histórico para Tucumán", indicó, a su vez, Manzur.