SANTIAGO DE CHILE.- Más de 800 representantes mapuches reclamaron por la autodeterminación política de su pueblo y la propiedad de tierras, y exigieron al presidente de Chile, Sebastián Piñera, que pida perdón público por el daño causado a esa numerosa etnia del sur del país. Aucán Huilcamán, vocero del Consejo de Todas las Tierras y principal organizador del evento, calificó de criminal al proceso histórico denominado "pacificación de La Araucanía", en el que el Estado chileno pretendió culturizar al pueblo mapuche. "Fue un acto de lesa humanidad; por lo tanto, tienen que reparar e indemnizar por el daño causado en estos 130 años. El Estado tiene que resarcir lo causado en todas sus formas", enfatizó.

El dirigente aseveró que el Gobierno aplica la doctrina de la negación en la relación institucional con los mapuches. "(La relación) ha sido diametralmente injusta, sin derecho a la tierra. Hay un daño cultural y ahí subyace un sentido de resistencia en las comunidades: ese acto de pacificación significa el atentado más feroz en contra de nuestro pueblo", sentenció. También acusó a Piñera de desoír el reconocimiento de Naciones Unidas, de septiembre de 2007, del aporte de los autogobiernos.

En la cumbre se suscribió un petitorio a las autoridades, en el que se expresa la voluntad de diálogo; la necesidad de formar una comisión paritaria para revisar los tratados existentes; el retiro de fuerza policial en la zona y la no aplicación de la Ley Antiterrorista, vigente a partir de los graves incidentes registrados a principios de año, con la muerte de un empresario agrícola y su esposa, cuando encapuchados incendiaron su casa.

En la conflictiva La Araucanía, donde vive la mayor parte de los 600.000 mapuches chilenos, la etnia está enfrentada con empresas agrícolas y forestales por la propiedad de tierras que considera ancestrales.

"Unidad del país"
Piñera advirtió que su Gobierno no está dispuesto a reconocer la autodeterminación del pueblo mapuche, bajo el argumento de que no se puede "poner en riesgo la unidad" del país trasandino. "Estamos orgullosos de ser un país multicultural", declaró en un encuentro con corresponsales periodísticos extranjeros.

"Vamos a velar por el estado de derecho. La aplicación de la ley no es contra el pueblo mapuche, sino que todos los países del mundo tienen leyes antiterroristas. Lo vamos a combatir en cualquier lugar de Chile, cualquiera que sea la etnia o el color", insistió.

El lunes tendrá lugar una nueva ronda de diálogo con los mapuches, encabezada por el ministro del Interior, Andrés Chadwick. (Télam)