BUENOS AIRES.- El jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, y el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, reavivaron la polémica en torno del aumento que sufrirá la tarifa del subte, mientras que desde la Ciudad hubo un reproche a la presidenta, Cristina Fernández, por quitar los subsidios. 

"No tenemos vocación de aumentar, pero nos retiraron los subsidios. No tenemos una maquinita para hacer billetes", ironizó Macri. A menos de un mes de retomar el control del servicio, el Gobierno porteño convocó a una audiencia pública para aumentar la tarifa del subte a $ 3,50, a un año del aumento del 127% que había modificado su precio de $ 1,10 a $ 2,50.

Ausencias y presencias
Randazzo encabezará hoy una reunión con funcionarios porteños y bonaerenses para intentar "evitar, a través del diálogo" la suba de la tarifa. Macri confirmó que no asistirá y en su lugar participarán su subsecretario de Transporte, Guillermo Dietrich, y el presidente de Subterráneos de Buenos Aires, Juan Pablo Piccardo. También fue invitado Daniel Scioli, porque además de los trenes, muchas líneas de ómnibus tienen un recorrido que abarca el Conurbano.

"Macri, que tanto pregona el diálogo, una vez más faltará a la invitación que le hice para hablar sobre el transporte del área metropolitana", se quejó Randazzo.

Desde Indonesia, la Presidenta cuestionó en su cuenta de "Twitter", los $ 3,50 al que quiere llevar el Gobierno porteño el valor del viaje en subte y calificó como una "verdadera locura" la posibilidad de fijar tarifas diferenciadas.
En respuesta a esas críticas, Macri advirtió que la mandataria ahora "está desesperada por ocuparse del subte", pero recordó que le quitó el 100% del subsidio que la Casa Rosada le otorgaba y "no se hizo cargo de ninguna de las obras" cuando tenía a su cargo la gestión.

Destacó, además, que Randazzo "dice cosas disparatadas, demostrando una enorme ignorancia. Estamos asistiendo a exhibiciones de verborragia sin sustento". (DyN)