Paren el éxito que se quiere bajar. O, mejor dicho, paren el caballo. Indiscutida revelación (y celebridad) de 2012, el rapero coreano Psy -inventor y difusor del "Gangnam Style"- reconoció el lunes que esa canción, el dichoso bailecito y la repercusión mundial lo hartaron. Así de simple. Que el reconocimiento masivo lo descolocó primero, le encantó después y lo saturó finalmente, y que lo más sensato sería cerrar la persiana de una vez y para siempre. "El tema se ha hecho demasiado conocido: me resulta difícil trabajar en un nuevo single", expresó, en un gran show de fin de año que dio en Nueva York.

Durante una entrevista que había dado en octubre a Clarín, ya surfeando la ola de la fama, Park Jae-sang -verdadero nombre del cantante- había reconocido que componer un nuevo hit le resultaba una actividad muy estresante. "Estudié mucho para hallar algo novedoso. Tardé un mes en encontrar el paso del caballo. Estaba con los coreógrafos en el estudio, llevábamos 30 noches de trabajo y pensábamos en el siguiente paso, ya que en Corea mi baile genera grandes expectativas. La presión era mucha", recordó, cuando se le preguntó cómo había surgido la coreografía más aclamada en los boliches y en las fiestas.

Aparentemente, Psy no estaría dispuesto a pasar por lo mismo en los meses venideros. Sabe que esta vez las expectativas no se ceñirán solo a su país, sino que tendrá que sorprender (y encandilar, otra vez) al mundo entero. ¿Cómo superar al hit cuyo video fue el primero en la historia de YouTube en ser visto más de mil millones de veces? Psy ni siquiera lo planificará. "Actuar el fin de año en Times Square es algo especial -señaló esa noche, en un show que coincidió con el día de su cumpleaños-. Todo junto puede ser un buen motivo para dejar el 'Gangnam Style'. ¿Qué mejor manera de terminar con ello? Es mi mayor y más importante cumpleaños".

Aun si Psy habló en serio y piensa abandonar la música definitivamente -se dice que sólo con el baile del caballo ha recaudado la entusiasta cifra de U$S 100 millones, por lo que no sería impensable-, no podrá hacerlo de inmediato: ya tiene pactados espectáculos en París y China, todos con su hit como frutilla del postre. Por las dudas, y como suele suceder siempre, ya está preparada una rueda de auxilio para el "Gangnam Style": el "baile del pescado", del paquistaní Muhammad Shahid Nazir, salió hace poco con la manifiesta intención de hacerle sombra al asiático.

La marcha atrás de Psy derivó en una encuesta que LA GACETA realizó entre cantantes y compositores tucumanos: ¿puede un músico quedar pegado a su mayor éxito? ¿Se termina convirtiendo este en una especie de carga? Si suele decirse que cada persona tiene derecho a 15 minutos de fama, ¿qué pasa en el minuto 16? Con humor y base en sus experiencias, cinco artistas locales respondieron a esas preguntas.

PABLO PACÍFICO
La maestra de sus hijos les enseña a cantar "Para mí"
Si el tipo este (por Psy) cree que no podrá hacer nuevamente un éxito es porque no es músico. Para los que componemos todo el tiempo, la mejor canción siempre es la que viene. En cambio él es humorista y, sinceramente, lo que hace es una cagada. En mi carrera con Los Peces Gordos hay dos temas que la gente pide mucho, "Para mí" y "El blues del Barrio Oeste II". Se podrá llamarles "éxitos", pero la verdad es que cuando un tema habla de cosas que son comunes al público, no pasa de moda. Un hit no debería generar presión. Al contrario, debería ser algo bueno porque dispara las expectativas del público y la obliga a escuchar lo que sigue. Si les gusta o no, ya es otra historia. Al mismo tiempo, al autor le genera más compromiso. Y también hay sorpresas lindas: en YouTube, he descubierto versiones chilenas y colombianas de "Para mí". La canta hasta la maestra de música de mis hijos.

GLADYS LA BOMBA
Hay vida después de "la pollera amarilla"
Es verdad que uno llega a pensar que nunca más podrá hacer un nuevo hit, pero eso es más fantasía que realidad. Mucha gente hizo temas lindos después de su mayor éxito: sin ir más lejos, luego de "La pollera amarilla" yo popularicé "Sobreviviré" y "Entre él y tú", dos temas que me recontra piden. De todos modos, sé que estoy encasillada con "La pollera..." y no me molesta: al contrario, en los shows espero el momento de cantarla porque es cuando se produce una explosión en el público. A lo que me niego es a grabar, como ya me lo han sugerido, la segunda o tercera parte de esa canción: me piden que vuelva a hacer un tema que comience con tambores, ¡y no, no quiero! Pero es cierto que el éxito del tema me condiciona para elegir los siguientes: uno trata de que sea una canción cortita, pegadiza y con letras sencillas. Después de todo, "La pollera amarilla" se escuchó hasta en España. Es muy fuerte.

LUCIANO GIRI
¿Se habrán cansado los beatles de "hey jude"?
Una misma canción puede ir cambiando porque es el público el que hace que cada interpretación sea diferente. Siempre pongo de ejemplo a los Beatles, que son mis referentes: ¿cuantas veces habrán cantado, por ejemplo, "Hey Jude"? A veces con más ganas que otras, a veces con tristeza... el resultado de la interpretación no sólo tiene que ver con la letra y la música, sino con la situación que están pasando el cantante y sus músicos y, por supuesto, la audiencia. Personalmente, nunca me cansaría de cantar el mismo tema: disfruto de todos, aunque reconozco que el repertorio de Yesterday, mi banda, es amplio y la gente pide de todo. Igualmente, pienso que lograr un hit sí te condiciona para componer o seleccionar las canciones que le siguen. Debe haber alguna fórmula, por algo hay grupos que siempre tienen un éxito a mano, aunque yo todavía no la he encontrado.

TONY MOLTENI
Hay que salir a aclarar que no faltará "Furia Calchaquí"
A uno le gustan todas las canciones propias, son como hijos, pero el público es el soberano. En el caso de Karma Sudaca, la gente eligió como hit a "Furia calchaquí": en toda nuestra carrera solo hubo dos shows en que no la cantamos. No me cansa. Disfruto haciéndola, más allá de que me gustan todos los temas, porque es lindo ver cómo la gente la canta, la grita y salta; eso me llena. Aparte es una canción que nos representa mucho como banda: hay espectáculos en que empiezan a pedirla desde el primer minuto y tenemos que decir "tranquilos, sí la vamos a cantar, pero al final". ¿Si uno se cree obligado a repetir el éxito? En el trabajo que continuó a "Furia calchaquí" dijimos "no hay ningún tema como ese", pero el pensamiento inmediato fue que cuando este salió no sabíamos que tendría la repercusión que tuvo. Si tiene que salir otro "bombazo", simplemente saldrá.

LUCHO HOYS
"Luna tucumana": el tema que sabemos todos
De los temas míos, los más pedidos son "Yocavil" y "Juntarnos", pero el más aclamado de todos es la versión que hago de "Luna tucumana". Y sí, me cansa cantarla, pero la interpreto de manera distinta a la original, con mucha polenta, y, al mismo tiempo, es un himno. ¿Viste cuando te piden "una que sepamos todos"? Bueno, esa es "Luna tucumana". Obviamente, cuando uno es compositor, quiere tocar más las letras que son propias, pero a la vez es consciente que eso no siempre coincide con la que la gente reclama. Por ejemplo, una vez hice una serie de shows en homenaje a Silvio Rodríguez que fue un éxito, pero después iban a verme solo para escuchar esos temas y eso ya no era lindo. Va en contra de uno. La percepción de que tenés que superarte es más del público que del autor. Hay personas que me dicen "nunca volviste a escribir otro tema como 'Yocavil'", y eso no es así y me da bronca.