MOSCU, Rusia.- El Este de Europa madura un gran plan para poder disputar el trono del fútbol continental: los grandes clubes de Rusia, Bielorrusia, Ucrania y Kazajstán planean la formación de una liga transnacional, una "Superliga" entre países que integraron en su día la Unión Soviética.

Cada vez existen más posibilidades de que se cree un liga soviética con el objetivo de aumentar los ingresos y la atención internacional para fortalecer los equipos y que estos puedan competir con los grandes clubes del oeste.


"Será una de las competiciones más fuertes de Europa. Cualquier futbolista querrá jugar en el torneo", señaló Valery Gassaiev, presidente y entrenador del equipo Alania Valdikavkaz.

Los dos últimos campeones soviéticos, Dinamo de Kiev ucraniano (1990) y CSKA de Moscú ruso (1991) son dos de los principales impulsores del nuevo campeonato, que dio el miércoles su primer paso con la formación de un grupo de trabajo liderado por Gassaiev.

Si todo va bien, la nueva liga podría disputarse en 2014-2015 siguiendo la estela de la recién inaugurada liga de hockey sobre hielo que aúna a equipos de Rusia, República Checa, Ucrania, Bielorrusia y Kazajstán.

Los equipos de fútbol ya no tienen ilusión por jugar partidos contra clubes de provincia delante de pocos aficionados en estadios ruinosos. Y una liga soviética reuniría a las mejores entidades y los mejores estadios. La idea está respaldada por los grandes clubes rusos, así como por el Shakthar Donetsk y el Dinamo de Kiev, que normalmente se disputan entre sí el título ucraniano, y el BATE Borisov.

Los beneficiarios no serían sólo los clubes, sino también sus dueños, importantes oligarcas. Una liga soviética significaría más espectadores y, por ende, más beneficios por derechos televisivos. El objetivo final es poder competir al mismo nivel que los grandes clubes del Oeste de Europa como el Barcelona, Manchester United, Bayern Múnich o Real Madrid. (DPA)