MÉXICO.- El gobierno de Enrique Peña Nieto, que asumió el 1 de diciembre en México, estimó que hubo "alrededor" de 70.000 muertos en los últimos seis años en la lucha antidrogas y reveló que surgieron entre 60 y 80 nuevos cárteles. El procurador general de Justicia, Jesús Murillo Karam, aceptó en una entrevista radial que aún se carece de un número preciso de asesinatos asociados con el crimen organizado, y explicó que la de 70.000 es "una estimación". El gobierno de Felipe Calderón dejó de contabilizar las muertes en septiembre de 2011, cuando divulgó la cifra de 47.515, pero organizaciones civiles mencionan números que van de los 60.000 a los 100.000 muertos.
Murillo Karam señaló que en los últimos años las autoridades se centraron en descabezar a los cárteles, pero "no se desraizó el grupo delictivo". Esto generó que los segundos en la jerarquía, "generalmente los más violentos", empezaran a generar sus propios grupos, y que las organizaciones desplazadas apostaran también por otro tipo de delitos, como el secuestro y la extorsión.
El diagnóstico del fiscal general coincide con el realizado en la víspera por el ministro de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, en un acto en el cual Peña Nieto anunció las líneas de acción para combatir la inseguridad. "Hay un gran consenso nacional: todos queremos un México en paz, más justo, más equitativo y más seguro", expresó Peña Nieto. Osorio Chong habló de "miles de muertos" y "miles de desaparecidos", pero en un texto escrito distribuido a la prensa figuraba, tachada, la cifra de 70.000 víctimas fatales y unos 9.000 cuerpos sin identificar. Peña Nieto anunció que aplicará una estrategia regionalizada para cinco zonas, que apostará por las labores de inteligencia, instituirá una Gendarmería Nacional con 10.000 efectivos y mantendrá a las Fuerzas Armadas en cada uno de los 32 estados del país y en zonas específicas, en línea con la estrategia del gobierno anterior.
El presidente indicó que su propósito es establecer "una auténtica política de Estado" en materia de seguridad, que permita lograr un México en paz como objetivo prioritario y se comprometió al respeto de los derechos humanos y a instituir un marco legal para atender la desaparición de personas.
Murillo Karam afirmó que surgieron "entre 60 y 80 cárteles de la droga y el narcotráfico, entre medianos y chicos, chicos entre comillas", que actúan en varias partes de la geografía de México. El crimen organizado ha crecido de una manera "verdaderamente impresionante" y "en una buena parte, la parte más fuerte" le tocó al gobierno anterior, agregó Murillo Karam. "Yo sí creo que faltó sentarse, planear y actuar de otra manera, pero cuando se es gobierno hay que tomar decisiones", completó. "La naturaleza de los delitos y el comportamiento de las organizaciones delictivas obedece también a un patrón geográfico", dijo César Duarte, gobernador del estado de Chihuahua, fronterizo con Estados Unidos y donde se localiza Ciudad Juárez, una de las zonas más violentas. (Télam-DPA-Reuters)