"Nosotros hoy estudiamos de manera profesional y salimos con un título de tecnico bailarín o de técnico en música. El nuevo plan de enseñanza es un secundario especializado en arte, que nos baja la carga horaria y nos reduce materias", explicó Rodrigo Medina, presidente del centro de estudiantes.
Otro de los reclamos es que se solucionen los problemas de hacinamiento en la ESEA. "Tenemos 52 compañeros por curso. La parte de infraestructura es un desastre. Queremos que pongan más aulas, o que revean los cupos", señaló Medina.
Por otra parte, los alumnos denunciaron que ante su reclamo de participación recibieron amenazas de parte de la directora. "No nos deja reunirnos en asamblea, nos prohibe hacer eventos y nos amenaza con sanciones -agregó el dirigente estudiantil-. Llegó a decirles a tres chicas que eran revolucionarias y que les podía pasar algo como lo que sucedió durante la dictadura". LA GACETA ©