BUENOS AIRES.- El Gobierno argentino pedirá el lunes a una corte de apelaciones de Estados Unidos que revise un fallo de un juez de Nueva York que ordenó al país pagar 1.330 millones de dólares a tenedores de deuda soberana incumplida.

"El lunes vamos a estar presentando un pedido de revisión de esta orden de (el juez de distrito Thomas) Griesa ante la cámara (corte de apelaciones)", señaló el ministro de Economía, Hernán Lorenzino, en una conferencia de prensa.

El funcionario dijo que no es una decisión "justa" la de obligar al país a pagar a los fondos "buitre", como el Gobierno argentino llama a los inversores que rechazaron las ofertas de canje de deuda que lanzó la Argentina y buscan por vía legal recuperar el valor completo de los bonos impagos desde 2002.

"No creemos realmente que sea una solución justa, como dice el señor Griesa, pagarles a los fondos buitre. Creemos, por el contrario, que pagarles a los fondos buitre es hacerlo a costa de quienes con su esfuerzo hicieron todo para que Argentina esté hoy en condiciones de pagar su deuda", agregó el ministro.

"Pura especulación"

El funcionario consideró que los buitres "tienen como objetivo fundamental la más pura especulación" y que "los medios que utilizan para lograr ese objetivo puramente especulativo tienen que ver con una cultura parasitaria".

Dijo también que Argentina seguirá defendiéndose en todas las instancias, incluso en la Corte Suprema de Estados Unidos. Lorenzino preguntó "¿quién va a entrar en un proceso de reestructuración de la deuda después del fallo de Griesa? Explíquenselo al que tiene que esperar 30 años y con una quita del 65 por ciento. Si sabe que con un juez como este termina cobrando el ciento por ciento y cash", se quejó.

El juez federal Griesa, en una fallo conocido en la noche del miércoles, ordenó a la Argentina que pague de inmediato a los tenedores de esos bonos. Además levantó una medida cautelar que impedía embargos contra Argentina y le dio tiempo al país hasta el 15 de diciembre para pagar los 1.330 millones de dólares.

Si el Gobierno argentino cumple con su amenaza de no acatar la orden judicial, Griesa adelantó que echará mano a los pagos por 3.100 millones de dólares que el país debe concretar en diciembre en Nueva York a los acreedores que aceptaron reestructurar sus deudas. Esto implicaría un incumplimiento técnico de la deuda soberana argentina y dejaría en el limbo bonos reestructurados por unos 24.000 millones de dólares.

Aclaración

"En diciembre de 2012, hay pago de intereses a los tenedores de bonos reestructurados por aproximadamente 3.140 millones de dólares. Presumiblemente, Argentina tiene pensado pagar el 100% de lo que debe. Hay actualmente deudas que se les debe a los demandantes", indicó Griesa. Aclaró que "esto es lo que se debe actualmente, no deuda sobre un período de tiempo futuro".

"Para poder cumplir con la orden judicial, Argentina tiene que pagarle a los demandantes el 100% de esos 1.330 millones al mismo tiempo o antes de que les pague a los tenedores de bonos reestructurados", en un depósito o cuenta de garantía, sostuvo el juez en su escrito. También, Griesa rechazó el pedido de Argentina para que se suspendieran las órdenes judiciales hasta tanto se haya terminado el proceso de apelaciones, que bien podría llegar hasta la Corte Suprema.

El canje de deuda fue anunciado el 3 de marzo de 2005, cuando el entonces presidente Néstor Kirchner y su ministro de Economía, Roberto Lavagna, aseguraron que el 75% de los acreedores aceptaba cambiar sus títulos, resignando un 65% del valor de esos papeles. Ese porcentaje de aceptación se amplió, en la reapertura del canje en 2010, hasta el 92%, por lo que quedaron sin adherir a la operatoria sólo un 8% de los acreedores. (Reuters-DyN)

Hacia la corte
La vía legal alternativa 

El Gobierno podría llevar al máximo tribunal de EEUU su reclamo de fondo sobre la cláusula "pari passu" argumentando que no cometió discriminación debido a que los fondos "buitre" podrían haber aceptado los canjes. Si aceptara estudiar el caso, la Corte debería aclarar si esta decisión tiene o no efectos suspensivos sobre el proceso. El caso podría ser aceptado debido a sus implicancias jurídicas para futuras reestructuraciones de deuda pública o privada.

Si pierde
La negativa oficial 

Si pierde su batalla legal, la Argentina podría negarse a aplicar la fórmula de compensación propuesta por el juez de Nueva York, Thomas Griesa. Según la agencia Reuters, esa situación es vista como posible dado que el país ha disputado sistemáticamente cada decisión judicial en favor de los fondos "buitre" y se ha negado a acatar algunas sentencias que dispusieron que se los compense por los daños ocasionados a raíz del incumplimiento.

Si paga
Algo poco probable 

Aunque luce improbable, el país podría terminar pagándole a los tenedores que reclamaron ante la justicia, ya sea cumpliendo con el fallo o llegando a alguna clase de acuerdo. Esto podría disparar demandas de los que aceptaron los canjes. Para resarcir a los tenedores de bonos incumplidos, el Gobierno debería suspender la "ley cerrojo". Argentina está cerca de un punto de no retorno: debería optar por buscar un acuerdo con los litigantes o empezar a remunerar sus tenencias.