MADRID.- La segunda huelga general contra el gobierno de Mariano Rajoy en España, convocada por sus drásticos recortes, terminó con graves disturbios en Madrid.

A lo largo de la jornada, las fuerzas de seguridad detuvieron a 142 personas, según el balance hecho por el Ministerio del Interior, mientras que los heridos podrían ascender al centenar. El enfrentamiento más fuerte se dio a la noche en las inmediaciones del Congreso de los Diputados, donde se congregaron miles de personas para realizar una vigilia hasta mañana.

Las fuerzas de seguridad cargaron con botes de humo y balas de goma contra manifestantes que les lanzaban piedras, botellas y otros objetos. Contenedores, papeleras y un vehículo ardieron en la zona y los bomberos tuvieron que intervenir. Los distubios se extendieron hasta las inmediaciones de la estación de Atocha. Hubo barricadas con contenedores ardiendo, destrozo de escaparates de comercios, marquesinas de autobuses y mobiliario, además de lanzamientos de bengalas y petardos. También en Barcelona hubo disturbios.

En cuanto a convocatoria, los dos grandes sindicatos, Comisiones Obreras (CCOO) y la Unión General de Trabajadores (UGT), proclamaron un "éxito" la huelga general. Un 76,7% de los trabajadores, casi 9,2 millones de asalariados, participaron del paro en un país que tiene ya casi 5,8 millones de desempleados y supera, por primera vez en su historia democrática, la tasa del 25% de la población activa. La gran industria paró de forma masiva. El seguimiento fue también muy alto en el transporte, pero se respetaron los servicios mínimos. 

El Ejecutivo consevador de Rajoy, por su parte, asegura que mantendrá el rumbo. "La hoja de ruta del gobierno es la única alternativa posible", dijoel ministro de Economía, Luis de Guindos. La huelga "no es el camino adecuado para reducir la incertidumbre", aseguró. (DPA)