BUENOS AIRES.- Esta historia no tiene excepciones: siempre trae cola. En la crónica de un superclásico, después del desenlace, los protagonistas siguen dando que hablar. Pasó en River, que se quedó con un punto tan escaso como doloroso y en Boca, que jugó su peor partido lejos y que igual se fue de Núñez con una sonrisa tan grande como el Monumental.

"Me costó dormirme porque me quedé pensando y mirando el partido nuevamente", dijo Matías Almeyda. El DT tuvo una nochecita para el olvido, mordiendo la almohada seguro. "Merecimos ganar y por algunos errores nos quedamos sin nada. Son cosas de las cuales tenemos que seguir aprendiendo", siguió el DT, buscando consuelo.

En La Ribera habló el capitán, que les dijo adiós a estas anécdotas. Rolando Schiavi jugó su último súper y reconoció que su equipo lo igualó justo. "Quizás lo hicimos sin merecerlo, pero empatamos 'a lo Boca', como tiene que ser", suspiró el zaguero. En caliente, un par de horas antes, el "Flaco" había disparado munición pesada contra Julio Falcioni, que eligió a Silva como encargado de dictar sentencia desde los 12 pasos, relegando al 2. "Siempre pateé los penales, pero si hubiera querido generar polémica agarraba la pelota y pateaba yo".

Otro que alzó la voz para quejarse fue Clemente Rodríguez, quien se mostró molesto porque fue reemplazado en el entretiempo. "Es la primera vez que me pasa en mi carrera. Me quedé sorprendido. Cuando estaba Riquelme estas cosas no pasaban. El segundo tiempo lo vi desde el vestuario, no tenía ganas de ir al banco. Me quedan seis meses de contrato pero en diciembre veré qué hago. No sé si seguiré en Boca", señaló. (Especial)