VIRGNIA, Estados Unidos.- La vida cambió por completo para Richard Lee Norris cuando sufrió un accidente con una pistola en 1997. Producto de este percance, el diparo le destrozó el rostro, los dientes, la lengua y la mandíbula. 

Tras 15 años en los que padeció por su nuevo aspecto, el hombre se sometió a una cirugía reconstructiva que tuvo una duración de 36 horas, y cuyos resultados fueron altamente positivos.

Comenzaron con el reemplazo de los nervios y el tejido muscular subyacentes desde el cuero cabelludo hasta el cuello, para finalizar con una reconstrucción facial completa.

“Ahora soy capaz de caminar entre la gente y que nadie me siga con la mirada", confesó el hombre de 37 años en una entrevista concedida al Daily Mail inglés. LA GACETA ©