Mañana es el Día del Niño. Y para aquellos papás que no tuvieron tiempo o que son olvidadizos, los comercios del centro de la capital permanecerán abiertos hasta las 22, en su mayoría. Además, atenderán en horario corrido, por lo que desde temprano comenzaron con la actividad, como si fuera un día de semana.
También los vendedores ambulantes se acomodaron, aún antes de las 8, a lo largo de la peatonal Mendoza, donde sobre cartones dispusieron su mercadería: caballitos de plástico, muñecos, pelotas, pistolas, dinosaurios, coches, instrumentos musicales y una infinidad más de pequeños divertimentos.
La expectativa está puesta en el rubro de juguetería. Por ello, los locales de esa especialidad esperan un gran movimiento, además de las librerías, cadenas dedicadas a la venta de productos de electrónica o casas de deportes. LA GACETA ©