OTTAWA, Canadá.- Valerie Tweedle y Robert Smith fueron los investigadores de la universidad de esta ciudad encargados de llevar adelante un peculiar estudio en el que se puso en comparación el grado de propagación del fanatismo por Justin Bieber con el de enfermedades como el sarampión.
Para ello utilizaron el modelo básico de epidemiología llamado SIR. Allí se distingue entre las personas que son “Susceptibles” a contraer la patología, las que ya están “Infectadas” y aquellas que están “Recuperadas”. Con las iniciales de las tres categorías se compone el nombre del modelo.
De acuerdo a la investigación, la gente afectada por la “fiebre Bieber” solo deja de serlo por aburrimiento o al conocer alguna información negativa sobre la vida de Justin. Sin embargo, luego de eso no se consideran “recuperados” sino que vuelven al estado de “susceptibles” de ser contagiados nuevamente, ya sea por el contacto con otros afectados o porque las informaciones positivas terminan por inclinar la balanza.
Según los investigadores, el caudal de información positivas que circula sobre el músico canadiense puede llevar a que todas las personas de entre 5 y 17 años resulten infectados. (Actualidad.rt – Especial)