"No podemos afirmar que las mesas de marzo fueron más productivas que las de diciembre o febrero; todavía estamos recibiendo la información de las escuelas. Estamos en abril y el desafío es cómo terminar el primer trimestre del año", le dijo a LA GACETA la ministra de Educación, Silvia de Temkin. Agregó que las versiones no oficiales sobre que se seguirán aumentando mesas de exámenes no tienen base real.

La funcionaria sostuvo también que desde hace un año se realizó un giro académico. La evaluación a los alumnos debe hacerse en forma permanente, con no menos de tres notas por trimestre, y dejando libertad al docente para optar por los métodos que mejor se aplican a sus clases. Además, explicó que si bien todavía hay una franja de chicos repitentes, esa población es cada vez menor gracias a los programas de mejoramiento institucional. "Hay escuelas en las que se trabajó profundamente con los chicos en riesgo, con docentes muy comprometidos con la tarea, y con buenos resultados -destacó-. Y hay otras que todavía se están esforzando, pero que aún no alcanzan los objetivos fijados".

No obstante, la ministra opinó que hay que mirar hacia adelante. "Nos interesa cómo harán las escuelas para terminar bien el trimestre. Es todo un desafío. Estamos trabajando con directores y supervisores junto a los equipos técnicos para planificar e ir mejorando este proceso, que es clave, porque hay que evitar que los alumnos terminen el año llevándose cinco, seis o más materias. Ahora es el momento de trabajar con ellos", enfatizó.

Según Rojkés de Temkin, lo más importante no es criticar cuántas mesas se les dan a los chicos, ya que están fijadas en el calendario escolar. "Lo que más importa es cómo acompañar pedagógicamente a los alumnos que tienen problemas con algunas materias", recalcó.