"Cuando Andrea R. empezó a relatar el momento en que se encontró con Marita (Verón), sentí la necesidad de tener alas y volar al lugar en el que esté mi hija, como esté. Tuve escalofríos", dijo Susana Trimarco, al referirse al testimonio de la joven que declaró la semana pasada en el debate oral, y que afirmó haber estado secuestrada en un prostíbulo de La Rioja.

Trimarco apuntó contra Irma "Liliana" Medina, sus hijos José "Chenga" y Gonzalo Gómez, y contra los abogados, que afirman que las mujeres que dicen haber visto a Marita en los burdeles riojanos mienten. "¿Acaso todas las chicas se van a poner de acuerdo en decir lo que dijeron? -se preguntó-. Son de distintas provincias y ni siquiera se conocían", remarcó.

Andrea R., comenzó a declarar el martes a la mañana, y su testimonio se extendió hasta el jueves a la noche. Trimarco escuchó la primera parte del relato de la joven, pero luego no volvió a tribunales. "Me dio mucha angustia. No fui después, porque no me quería caer. No es nada fácil escuchar que una hija fue violada, apuñalada y que pasó por todas esas cosas", explicó la madre de Marita.

Explicaciones

En el juicio hay 13 personas acusadas, y deben declarar aún cerca de 140 testigos. Pero Trimarco cree que debe juzgarse a otros presuntos involucrados, y agregó que algunos funcionarios tienen que dar explicaciones en la Justicia. "Tienen que citar a Julio Miranda (ex gobernador de la provincia), para que explique por qué metió a los Ale en la Casa de Gobierno, sabiendo que son una mafia. También es responsable de la desaparición de Marita", afirmó.

Finalmente, pidió que el Estado se haga cargo de la protección de las mujeres víctimas de trata que deben declarar en el juicio. "Quiero desearle lo mejor a Andrea, que sé que pudo formar su familia. Le pido al Estado que le dé seguridad, porque estos delincuentes no se van a quedar con los brazos cruzados. A ella y a todas las víctimas de trata de personas", manifestó.