BUENOS AIRES.- La presidenta, Cristina Fernández, acusó al jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, de tener "una actitud de capricho y adolescente" por su rechazo al traspaso del subte, pero dio marcha atrás con el retiro de la Policía Federal de los andenes, la medida que hizo fracasar las negociaciones y provocó un paro de casi 12 horas. La jefa de Estado, que puso al líder del PRO como principal antagonista político, insistió con que el subte continúa "a cargo del gobierno de la Ciudad" y advirtió que "es poco serio que un gobernante, por conferencia de prensa, le tire por la cabeza a otro un contrato firmado".

Funcionarios porteños y dirigentes del PRO insistieron con que la responsabilidad y el control sobre el subte es del Gobierno nacional y cuestionaron la decisión de la ministra de Seguridad, Nilda Garré, de retirar la Policía Federal de la custodia de ese medio de transporte, medida que la presidenta decidió dar marcha atrás, por un plazo de "30 días". De hecho, el anuncio realizado por Cristina derivó en que el paro en el subte que cumplió la Unión Tranviarios Automotor (UTA) en demanda de seguridad se levantara a las 17, tras estar todo el día sin servicio.

Ante la Asamblea Legislativa, la jefa de Estado cargó con una dureza inusual contra Macri, aunque sin nombrarlo en ningún momento. "Recién ahora descubrió que los vagones de ese sistema son viejos. ¿Creía que era alcalde de Nueva York?", se preguntó con ironía y de inmediato aseguró: "no, es de la Ciudad de Buenos Aires".

"Le voy dar la instrucción a la ministra Nilda Garré que le prorrogue por 30 días más la Policía Federal", dispuso luego de la suspensión de esa presencia generara ayer un paro de actividades por parte de la UTA. "A ver si en tres meses (Macri) puede organizar 240 personas con uniforme policial en las líneas de subtes de la Ciudad de Buenos Aires", indicó Fernández, en referencia al nuevo plazo que ahora incluye enero, febrero y marzo. Ayer, Macri había anunciado la suspensión del traspaso del subte a la Ciudad luego de que Garré comunicara la decisión de que a partir de ayer se retiraría a los agentes de la Federal para vigilar las estaciones, mientras que por la falta de seguridad la UTA realizó un paro que dejó a más de un millón de usuarios sin servicio de transporte. "Fue un bochornoso episodio en donde por conferencia de prensa me quisieron devolver los subtes", aseveró la mandataria respecto de la decisión de Macri anunciada a través de los medios de comunicación y advirtió: "uno no puede revolear concesiones como si fueran pares de zapatos; es una actitud poco seria, adolescente y caprichosa".

Los diputados Federico Pinedo, Gabriela Michetti y Jorge Triaca y el vicepresidente 1º de la Legislatura, Cristian Ritondo, replicaron con dureza a la presidenta y la acusaron de "mentir" y aclararon que la responsabilidad sobre el subte sigue siendo la Nación. (DyN)