CIUDAD DE MEXICO, México.- En 12 de los 32 estados mexicanos, los muertos se cuentan por decenas y la ola de violencia no tiene miras de detenerse. La guerra narco se cobró, en cinco años, la vida de 60.420 personas.

Según el diario mexicano "Reforma", en los dos últimos meses del año fueron ejecutadas 1.250 personas, por lo que la cifra de 2011 superaría las 20.000 víctimas mortales.

Estos niveles posicionan la guerra de la droga por sobre la guerra en Irak, que duró casi 9 años. Incluso la de Afganistán sería menos sangrienta que la mexicana, según el diario español ABC.es.

El 80,5% de la lista sangrienta se concentra en 12 de los 32 estados del país. El estado más afectado por la violencia es Chihuahua, con 12.712 asesinatos en cinco años.

Ciudad Juárez es el punto más complicado. Se la considera la urbe violenta del mundo, con 191 homicidios por cada 100.000 habitantes. Allí, 12.000 niños quedaroan huérfanos y 120.000 personas fueron desplazadas.

Los crímenes sangrientos comenzaron a tener protagonismo en 2006, destaca Infobae.com, y desde esa fecha los muertos se cuentan por decenas en cada ataque.

El Operativo Michoacán, que dispuso el presidente Felipe Calderón apenas asumió el poder, no logró revertir la violencia, pese al despliegue de más soldados en las zonas más peligrosas.

En 2006, al cártel de los Zetas se le adjudicaban 62 muertes. En 2007, ese número ascendía a 2.826. En 2008, la cifra volvía a multiplicarse y alcanzaba las 6.837 muertes; en 2009, las 11.753; en 2010, las 19.546; y desde principios de 2011 hasta el 31 de octubre, los asesinados fueron 19.396. (Infobae.com-ABC.es)