Cuando hiciste clic en "publicar", "compartir" o "twittear" ya no hay vuelta atrás. Lo que escribiste en tu muro de Facebook o en tu Twitter, las fotos o el video que subiste, tus comentarios, tus ideas, tus sentimientos, todo, se hace público. Y si sos un poco descuidado con las opciones de privacidad, tal vez no solamente tus amigos lean y vean, sino también los amigos de tus amigos. Y así, puede pasar que tu intimidad quede expuesta ante alguien que vos no querías o que no te conviene que sepa cosas tuyas. O podés ser de los que acumulan amigos porque sí, no sólo personas, sino también negocios, bares, instituciones, pero no tenés idea de quién o quiénes están detrás de esas páginas "institucionales". Quienes las manejan son anónimos. Así que a la hora de sumergirte en las redes sociales, tené en cuenta un mínimo de recomendaciones que te evitarán problemas.

1- Nunca digás en qué lugar estás en el momento en que estás escribiendo. De esa manera evitás que te localice alguien a quien no querés ver o, si no estás en tu casa, nadie lo va a saber.

2- No contés que te vas de vacaciones, y mucho menos des fechas. Es como invitar a los ladrones a entrar en tu casa. Como dijimos antes, no tenés control sobre quiénes pueden estar leyendo tu muro o tu timeline de Twitter.

3- No hagás comentarios sobre cosas valiosas que te compraste. Es otra manera de abrir las puertas a posibles robos. Tampoco hagás mención a ninguna cuestión vinculada con dinero: si cobraste o pagaste o lo que sea.

4-
Si vas a hacer una fiesta en tu casa, no invites a través de las redes. Podría caerte alguien que no conozcas, que no quieras ver o esos inspectores tucumanos que clausuran fiestas...

5- Está bien que te dediqués a los jueguitos, pero no está tan bien que llenés el muro de tus amigos con publicaciones que no les interesan. No des OK a peticiones como "Compartir XP" ni invités a gente que no los use.

6- Si te dedicás a vender productos o artesanías por medio de las redes, sé prudente. Difundí lo que ofrecés pero no etiquetés a todos tus contactos en las fotos que publicás.

7- Un consejo básico y muy repetido aunque no por eso seguido es el de la elección de contraseñas. La mayoría tiende a usar la misma contraseña para el Facebook, el mail, Twitter, etcétera. Eso es muy peligroso. Si te te la descubren, invadirán toda tu privacidad y tus cuentas.

8- En tus perfiles no pongás la fecha completa de tu nacimiento. Es un dato muy importante a la hora de corroborar tu identidad para, por ejemplo, operaciones financieras.

9- Si tenés hijos no pongás descripciones de ellos ni contés a qué escuela van o qué actividades tienen. Con los menores hay que tener muchísimo cuidado, porque son los más expuestos a los peligros de internet.

10- Antes de apagar o dejar la compu cerrá todas las sesiones. Alguien puede leer el historial de tus chats y usar lo que escribiste o lo que te dijeron en contra de vos.