El tiempo de las vacaciones se acerca y los operadores turísticos suman a sus habituales trajines de fin de año una preocupación política. Mientras siguen con sus ventas de viajes, prenden una vela para que la Casa Rosada flexibilice los controles sobre la compraventa de divisas o para que los países limítrofes adopten medidas que faciliten la llegada del viajero argentino.

Precisamente, la mirada se posa sobre el dinero que debe llevar el turista al exterior, ya que aunque muchos servicios se ofertan en dólares, en su gran mayoría, pueden pagarse en pesos. De hecho, se toma el valor oficial de la moneda estadounidense para la pesificación.

"Decían que se iba a desregular la situación, para los viajeros. Si no, la gente verá muy complicada su partida al exterior", opinó Adolfo Giordano (operador de Latin Adventure), que participó ayer del XVI° Workshop de la actividad, "Abriendo una ventana al mundo". El encuentro -organizado por la Asociación Tucumana de Agentes de Viajes y Turismo- congregó a 60 operadores mayoristas de servicios turísticos, hoteleros y de líneas aéreas; a los municipios de Yerba Buena y de San Miguel de Tucumán, los Entes de Turismo de Buenos Aires y de Tucumán y al consulado de Brasil en Córdoba. "Tengo entendido que desde el Gobierno dijeron que quizás en 15 días se iba a resolver para los turistas que viajan afuera; creo que iban a poder comprar dólares o euros presentando el pasaje aéreo", agregó Giordano, que pidió que no se genere una psicosis en torno de este tema.

Adrián Carrizo (TN Operador Mayorista) se mostró optimista. Consideró que la solución para el viajero puede llegar por múltiples vías. "Si no hay acuerdo con el Gobierno argentino, Brasil podría autorizar a que algunas tarifas en comercios brasileños -en especial en hoteles, excursiones, restaurantes, bares y negocios de venta de recuerdos- se cobren en Peso o en Real", dijo. La medida no resulta descabellada. Días atrás, agentes turísticos de Uruguay pidieron al presidente de ese país, José Mujica, que avale el uso de moneda argentina en los destinos turísticos uruguayos, debido a los problemas para comprar divisas. El interés de los operadores se funda en que, durante el verano, el argentino es el principal cliente -en especial, en Punta del Este- y temen que se reduzca la cantidad de turistas.

Según precisó, durante la última Feria Internacional de Turismo, que se realizó en Buenos Aires, se planteó la problemática -por esos días, incipiente- y surgió la idea de elevar el pedido al Gobierno brasileño. "Yo soy optimista, entre el 60% y el 70% del turismo en Brasil es argentino; estimo que considerarán el problema que tenemos", afirmó.

Para otros operadores, todavía no se sintió el impacto de las medidas sobre las operaciones con divisas. "Aún no recibimos ninguna disposición sobre posible cobros en peso, en nuestros hoteles en Bolivia", dijo Patricia Caia (de un hotel de la cadena Camino Real). "De todos modos, en ese país resulta muy sencillo comprar Bolivianos con el peso", añadió.