Los Cafres siguen puliendo su fórmula de reggae prolijo y amor. El nuevo disco aporta sutiles arreglos y un puñado de canciones románticas capaces de sensibilizar o emocionar a quien quiera someterse a esos avatares.

Novedades no. La banda, con más de dos décadas de camino recorrido, se mantiene firme en su paso al ritmo de la voz dulce de Guillermo Bonetto. Tiene, si, una línea conceptual que se sostiene sin pretender convertir al álbum en una historia única de principio a fin, sino con el objetivo de encadenar canciones e historias independientes entre sí.

El productor Jim Fox (Don Carlos, Gregory Issacs, Black Uhuru, Israel Vibration y Culture entre otros), profundiza y explota esa veta que ya es una marca registrada por Los Cafres. El conjunto hace de "El paso gigante", con ilustraciones de Bonetto incluidas, un disco agradable y llevadero.