WASHINGTON, Estados Unidos.- El mundo lo pide, ellos (por ahora) no lo dan. En el Gobierno de Estados Unidos persisten las dudas sobre la conveniencia de publicar las fotos del cadáver de Osama Bin Laden, tras el operativo que terminó con su vida. Según reprodujo el diario porteño "La Nación", algunos funcionarios son reacios a alimentar el resentimiento islámico si se muestran las imágenes y los videos de los minutos finales del líder de Al Qaeda.
Mientras tanto, ya se han hecho algunos adelantos de cómo lucía el cuerpo del terrorista: de acuerdo con una fuente oficial, tenía un disparo en el pecho y otro en el ojo izquierdo. Por el momento, la Casa Blanca indicó que no difundirá las fotos de los restos, al que se identificó "por reconocimiento físico y por un examen de ADN", mediante una muestra tomada a una hermana de Bin Laden.
Sin embargo, el Gobierno norteamericano conoce las especulaciones que hay en el mundo sobre el tema y, por eso, algunos funcionarios se volcarían por dar a conocer las pruebas de que el líder terrorista está muerto. Por otro lado, más datos se han deslizado de la operación en la que murió el corazón de Al Qaeda: el equipo de asalto de EEUU encontró discos rígidos, DVD y otros documentos que podrían ayudar a la inteligencia de ese país a detener al segundo de la red, Ayman al-Zawahri.
También trascendió que la bala que terminó con la vida de Bin Laden impactó arriba del ojo y le destruyó parte del cráneo. El presidente Barack Obama y su equipo siguieron todo desde la Casa Blanca, con video y audio del operativo, paso a paso. (Especial)