Sin anillo.- Sólo Kate usa un anillo de bodas, el cual era deslizado en su dedo por William mientras decía: "con este anillo te desposo". Se trata de una alianza sencilla, fabricada por la joyería Wartski a partir de una pepita de oro proveniente de una mina del norte de Gales.
El vestido.- Según un comunicado de Clarence House, residencia del príncipe Carlos, la novia deseaba que su vestido combinara tradición y modernidad. El encaje es un delicado trabajo manual de la Escuela Real de Bordado (RSN). La técnica utilizada tiene su origen en la Irlanda de 1820. El ajustado corpiño recordó a los corsés de la época victoriana (1819-1901).
Una canción para ellos.- El cantante George Michael les dedicó una versión de la canción de Stevie Wonder, "You and I". Cuando le preguntaron por qué no asistiría a la boda respondió: "la pareja debe estar rodeada por la gente que ama, no por estrellas del pop que son ex convictos".
El sombrero loco.- Philip Treacy es el diseñador de tocados más famoso de Inglaterra. Kate ya lució varios de sus diseños en eventos sociales y muchas de las invitadas a la boda eligieron sus creaciones.
A favor y en contra.- Ayer, el diario británico "The Guardian" ofreció una edición en la que no mencionaba nada de la boda real para aquellos lectores a quienes no les interesaba el acontecimiento o que, simplemente, están en contra del régimen monárquico.
Romántico.- El príncipe William rompió -de la mejor manera- el protocolo cuando su prometida llegó al altar: la miró y le dijo "estás preciosa".