Con el avance de la fotografía digital, la tradicional ha quedado relegada. Aunque la foto virtual ofrece muchas ventajas, su preservación y su almacenamiento tienen sus riesgos.
A los profesionales y a los aficionados de la fotografía les preocupa mejorar el criterio de selección tanto como el soporte adecuado para su preservación.
"Más que la preservación de la imagen, preocupa el criterio de selección y de cómo se la archive. Si bien es cierto los cambios informáticos se producen y multiplican en períodos de tiempo cada vez más cortos, las características de los soportes aún ponen en riesgo de perder las fotografías que se guardan. Ya sea por capacidad limitada, por exceso de producción o por lo que sea". La conclusión de los expertos consultados por LA GACETA, condiciona la manipulación y almacenamiento de las fotos a los criterios de selección en lugar de a los avatares de la tecnología.
La fotografía, como un testigo del tiempo y de la historia, intenta mejorar sus métodos de preservación en diferentes soportes (papel, tela, piedras, papiros, maderas, arcillas, etcétera). "Al reproducirse digitalmente se almacenan los archivos y se supone que se llega a una solución respecto al paso del tiempo. Pero estos procedimientos -según señalan docentes de la tecnicatura en fotografía de la Facultad de Artes-, tienen la máxima utilidad en la posibilidad de la divulgación y comunicación de dichos documentos, no así en la facilitación de su conservación".