LA PAZ.- El presidente boliviano, Evo Morales, rechazó ayer la propuesta de los principales sindicatos del país de usar las reservas internacionales para incrementar los salarios en 15%, cinco puntos porcentuales más de lo que ofreció su Gobierno.

Morales sostuvo que las reservas del país, que llegan a U$S 10.000 millones según datos oficiales, servirán "sólo para producir más" y lamentó que la exigencia laboral, liderada por la Central Obrera Boliviana (COB), haya provocado un conflicto que lleva dos semanas. "Jamás podemos engañar a los trabajadores; el único problema es que una reivindicación la convierte en una ambición", señaló el mandatario en un acto público realizado en el municipio cochabambino de Quillacollo, donde inauguró obras.

Desde 2007, Evo ofreció invertir las reservas internacionales del país en varios proyectos estratégicos, incluida la industrialización de las reservas de litio y gas. Hasta el momento ninguno de estos anuncios se concretó.

Entre tanto, en La Paz, la capital administrativa del país, al menos cuatro ministros del gabinete de Morales mantienen intensas conversaciones con la directiva de la COB para desactivar la ola de protestas que incluyó el corte de varias rutas estratégicas del país. No obstante, la demanda salarial frena la suscripción de un acuerdo entre ambas partes. "Ahí nos hemos trancado", reconoció Morales.

Cientos de trabajadores mineros, del sector de salud y maestros de las escuelas públicas permanecen desde el sábado fuera del edificio de la vicepresidencia, donde se realizan las negociaciones, a la espera de una solución.

Los sindicatos persisten en su exigencia salarial y que, además, ésta abarque a todos los sectores, porque la oferta gubernamental del 10% sólo beneficia a la policía, maestros, trabajadores de la salud y militares. También reclaman por el alza del costo de vida que se refleja una inflación del 11% entre marzo de 2010 y de 2011.

El viernes se registró la jornada de mayor violencia desde que estalló el conflicto, al enfrentarse la policía con manifestantes, que dejó un saldo de ocho heridos durante el corte de la ruta que vincula a La Paz con El Alto y el resto del país.

En tanto, las organizaciones de periodistas de Bolivia elevaron una queja internacional por las agresiones de la policía contra reporteros durante la cobertura de las recientes protestas. (AFP)