La espera valió la pena, parecieron decir las decenas de vecinos que se acercaron a admirar cómo quedó la plaza Urquiza luego de varios meses de obra y de una inversión de tres millones de pesos.
El paseo se abrió al público a las 18.30, desde entonces permaneció repleto. En un sector se instaló la banda de música de la Municipalidad, en otro se escuchó folclore y luego tango, mientras que algunos grupos hacían actividad física o patinaban.
El acto, al que asistieron el gobernador José Alperovich y el intendente Domingo Amaya, fue corto y austero. Los funcionarios recorrieron la plaza y, a frente al monumento a Urquiza, cortaron la cinta y descubrieron una placa.
El secretario de Planificación de la Municipalidad, Luis Lobo Chaklian, hizo una descripción de las obras que se realizaron, como la recuperación de la fuente, el sector de juegos infantiles y la delimitación de un área para los estudiantes. LA GACETA ©