El devastador terremoto causó pérdidas en Japón, estimadas en unos U$S 200.000 millones, y abrió un signo de interrogación a la economía mundial. Los analistas consultados por LA GACETA consideran que, en la Argentina, habrá un impacto indirecto sobre el fenómeno nipón. Y que, en la actualidad, esa situación se observa en el precio de los commodities, que cerraron la semana en terreno negativo. Otra consecuencia negativa que puede tener la economía argentina es cierta aversión al riesgo, en el que los mercado evitan comprar deudas hasta tanto se normalice la situación. Esto puede causar un menor ingreso de capitales foráneos al país, al ya escaso flujo existente, sostienen los especialistas.