Lo que hizo Héctor, utilizando una bicicleta de mountain bike en lugar de una para velódromo, es extraordinario. Está claro que dio muchas ventajas. Para empezar, en el velódromo el viento pega mucho. Si bien en la bici de pista también se siente el viento, es mucho menos intenso por la posición. Además, las ruedas que tiene la de mountain bike se pegan a la pista porque las cubiertas que se usan tienen dibujos y "dientes" que generan mucho contacto con el suelo para un mayor agarre. En las de pista las ruedas son de carbono, la delantera con perfil alto y la trasera con tapas que ayudan a la rigidez, para que la energía empleada se aproveche al máximo, ya que se las utiliza en una superficie lisa. La diferencia aerodinámica, de geometría y la rigidez hacen la diferencia. Básicamente, Héctor usó un auto del Rally Dakar para competir en Fórmula 1. ¡Y subió al podio!