Crónica
EL CASO ARROYO DULCE
Hernán Carbonel
(Galmort - Buenos Aires)
Entre julio y diciembre de 1971, el Banco de Crédito Rural de Arroyo Dulce- partido de Salto, provincia de Buenos Aires- fue asaltado dos veces. El desarrollo casi cinematográfico de estos hechos -balaceras, detenciones, secuestro de personas y vehículos trasbordados- parece haber inspirado, aunque su autor lo niega, la novela de Antonio Dal Masetto Siempre es difícil volver a casa. También hay elementos afines, aunque no comprobables cronológicamente, con la obra Plata quemada, de Ricardo Piglia. El libro de Carbonel aporta testimonios diferentes o disidentes con algunos aspectos de ambas obras y de otras que se muestran en el transcurso de su lectura. La obra es un trabajo minucioso y laborioso de índole periodística en el que se presentan los testimonios acompañando al lector en forma neutral. En algunos casos los entrevistados no quieren hablar por temor, o por querer olvidar la historia que vivieron. En otros, detalles reveladores están amparados por el beneficio de la duda o las contradicciones.
Básicamente, el libro intenta esclarecer si ambos asaltos estaban relacionados y si fue robo común o acción de Montoneros. El autor señala la veracidad de datos concretos sobre Omar Failache y Viera, de militancia montonera y sus presuntas vinculaciones. Menciona la relación con otras figuras de la izquierda peronista y de la extrema derecha; de la policía y de grupos de choque, de una época olvidable, en los que se menciona a Aníbal Gordon, J.C.Bianchi, Cámpora. Aquí el libro se torna laberíntico por la disidencia de los testimonios que ponen en duda muchos detalles circunstanciales. Así, en el capítulo "¿Robo común o acción de montoneros?" una ex militante peronista residente en Salto, pone en duda la veracidad de hechos narrados por Eduardo Anguita y Martín Caparrós en su libro La voluntad.
Se trata, en suma, de un libro complejo, cuyo mérito estriba en haber reflejado a través de esos hechos y su excelente trabajo de investigación, el caos reinante en el país en una época de violencia y muerte. El entusiasmo con el que emprende su sondeo periodístico, mostrando alternativamente y con equidad versiones antagónicas -para que el lector saque sus propias conclusiones- le otorgan un valor agregado.
© LA GACETA
Horacio Semeraro