BUENOS AIRES.- El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, aseguró hoy que desde el Gobierno nadie le dijo al vicepresidente Julio Cobos y al ex presidente Eduardo Duhalde que tenían prohibida la entrada al velatorio de Néstor Kirchner.
"Yo decidí llamarlos para decirles que me parecía que su presencia en la Casa Rosada iba a generar una controversia severa. Lejos de sumarse a quienes tenían la vocación de hacer llegar sus condolencias, le iban a generar un dolor de cabeza a la presidenta, Cristina Fernández de Kirchner", indicó el ministro.
Fernández afirmó que si hubiesen querido, ambos podrían haber entrado y pasado hasta el lugar en donde se encontraba la jefa de Estado. Admitió, a su vez, que con Cobos no habló y utilizó a una persona de confianza común. "A través de ella, el vicepresidente me respondió que agradecía mi planteo", expresó.
En cambio, contó que sí dialogó con el ex gobernador de Buenos Aires y que le dijo: "Eduardo, no me parece saludable que usted esté presente acá porque va a traer complicaciones. ¿Escuchó lo que se dice de Cobos y de usted?. Va a generar un conflicto, no lo genere". Según Fernández, Duhalde aceptó la sugerencia. (DyN-NA)